Tom Cruise y Nicole Kidman firmaron contratos por tiempo indefinido. Estuvieron de acuerdo en trabajar en este proyecto hasta que Stanley Kubrick les liberó de ello, sin importar el tiempo que resultara ser al final.
Stanley Kubrick consideró que esta película era la mejor que había realizado a lo largo de su trayectoria profesional.
Se barajó la posibilidad de que Johnny Depp estuviera presente en el proyecto con la intención de que desempeñara el papel del Doctor William Harford. Finalmente, fue Tom Cruise el encargado de meterse en la piel de dicho personaje.