Consuelo mutuo
por Eulàlia IglesiasUna de las últimas películas que rodó Sidney Pollack (su filmografía como director la cerraron un documental sobre Frank Gehry y 'La intérprete'), 'Caprichos del destino' empieza como un drama en torno a un policía que descubre al mismo tiempo que su mujer ha muerto en un accidente de avión y que le engañaba con otro hombre. En su primera hora, el protagonista masculino se obsesiona en averiguar más sobre este asunto: como buen policía lo investiga casi como cualquier otro caso. Pollack desarrolla sus emociones con delicadeza, elegancia y atención.
Cuando conoce a la viuda del amante de su esposa, una atractiva política, entre ambos surge la necesidad de mutuo consuelo que poco a poco va derivando en una atracción mayor. A partir de aquí el film se complica y pierde fuelle. 'Destinos cruzados' resulta mucho más interesante y conmovedora en su primera parte, que en su segunda, donde la historia de amor se presenta forzada y excesiva.
A favor: la interpretación contenida y a la vez obsesiva de Harrison Ford.
En contra: esa banda sonora con saxofón, como de película erótica de segunda.