Últimas opiniones sobre 9 meses... ¡De condena!

Producción francesa dirigida por Albert Dupontel que además es uno de los protagonistas principales; es Bob Nolan y es un delincuente y te voy a contar de que va la cosa....
Ariane Felder es una juez de instrucción y tiene una vida bastante monótona, dedicada plenamente a su trabajo; no tiene pareja, no tiene hijos y resulta que después de una nochevieja y de haber tomado alguna copa de mas, parece que se que da embarazada, de ahí el título. La cosa se va liando conforme avanza la historia, porque la juez no recuerda nada de nada, no sabe quien es el padre y se mete en una investigación para descubrirlo. No quiero desvelar mucho, pero la juez consigue averiguar quien es el padre y a partir de ahí, son situaciones absurdas, casi de chiste algunas. Hay momentos muy divertidos, momentos surrealistas que desde luego consiguen sacarle alguna risa al espectador. A mi me ha gustado bastante, me he reído en muchas ocasiones; los franceses saben hacer estas cosas, y lo hacen muy bien, la película da lo que ofrece y hace pasar un buen rato. También es verdad que arranca muy bien y se va perdiendo y va aflojando, pero no aburre nada. Toda la historia la llevan Ariane y Bob, pero el resto de secundarios cumplen muy bien, unos más que otros hacen su parte y hay gags muy divertidos. Ya te he comentado que Bob es un delincuente, un preso fugado, un asesino globófago, que descuartiza y se come los ojos de sus víctimas , pero todo no es lo que parece. Creo que la película es muy divertida y eficaz, no hay que darle muchas más vueltas, es para lo que es y a mi me ha gustado, he pasado un buen rato y en los tiempos que estamos eso es mucho. Te contaré como curiosidad que el papel de Ariane se lo ofrecieron a Emma Thompson pero lo rechazó.

excelente comedia la recomiendo para las personas de buen humor, ahi dejo un link para verla online

Comedia francesa fresca, ágil y divertida que no sigue los cánones habituales en su desarrollo, un pequeño toque de originalidad que permite diferenciarla y saborearla con buen gusto. Buena e interesante pareja la formada por Sandrine Kiberlain y Albert Dupontel -quien realiza también la labor de director y guionista-, que le proporciona frescura y una tonalidad atractiva, una comicidad palpable que se agradece y disfruta. Sin tener un gran guión ni un argumento ni ningún otro elemento que destaque especialmente es capaz de conseguir su objetivo cumplidamente; hacerte sonreír y reír ocasionalmente, una tenue y muy conseguida diversión que proporciona eficaz entretenimiento. Y para no repetirme de nuevo ese es su sello, su sencilla carta de presentación; divertir, distraer y amenizar una buena velada, de rápido paso que alivia ocasionalmente, con evidentes logros en su resultado práctico y sin ningún otro objetivo a la vista. Nada destacable pero muy eficaz en su conjunto al completo.