SensaCine adapta las notas de cada medio con una puntuación de 0.5 a 5 estrellas.
críticas de medios
New York Post
por Kyle Smith
"Me he reído más con esta revisión de los clásicos del western de los años '60 que con todas las comedias del año juntas".
Entertainment weekly
por Chris Nashawat
"No sé si Mil maneras de morder el polvo convertirá a los que odian MacFarlane en fans. Pero para aquellos de nosotros que somos seguidores, esta la parodia lasciva es la prueba de que debajo de toda esa inmadurez propia de un malcriado, habita una gran inteligencia y un corazón exorbitantemente satírico".
USA Today
por Claudia Puig
"A pesar de moverse en lo terreno de lo vulgar, la cinta tiene cierto parecido con Sillas de montar calientes; y al igual que la comedia de Mel Brooks, sus golpes cómicos son brutales".
Cinemania
por Mariló García
"Para sus seguidores, es Seth MacFarlane en estado puro: una sucesión de sketches, más propios de sus series, deslavazados sobre todo al inicio de la película, con el propio creador dando la cara por primera vez"
"Combinando algún que otro do de pecho escatológico con una inesperada fe en la pervivencia de la comedia clásica, la película no supera la energía y brillantez de Ted (2012), su opera prima, pero su gran ambición se ve razonablemente sostenida por un sobrio armazón de inteligencia cómica, quizá demasiado autorreflexiva a su pesar."
"Podría llamarse la Sillas de montar calientes del nuevo milenio, o podría denominarse de mal gusto".
Boston Globe
por Ty Burr
"Está claro lo que MacFarlane aspira a convertirse en el Bob Hope y el Mel Brooks de su generación. Pero los deseos de uno no siempre se cumplen".
Fotogramas
por Noel Ceballos
"(...) el cineasta se encuentra perdido dentro de su propio egotrip, incapaz de cederle espacio a sus secundarios talentosos y empeñado en combinar elementos tan antitéticos como la sal gruesa habitual con la distinción de un musical de la MGM."
"Seth MacFarlane ha rodado una flácida farsa, plagada de estrellas. Un envoltorio elegante, que no contiene casi nada de valor en sus dos horas de metraje".
New York Post
"Me he reído más con esta revisión de los clásicos del western de los años '60 que con todas las comedias del año juntas".
Entertainment weekly
"No sé si Mil maneras de morder el polvo convertirá a los que odian MacFarlane en fans. Pero para aquellos de nosotros que somos seguidores, esta la parodia lasciva es la prueba de que debajo de toda esa inmadurez propia de un malcriado, habita una gran inteligencia y un corazón exorbitantemente satírico".
USA Today
"A pesar de moverse en lo terreno de lo vulgar, la cinta tiene cierto parecido con Sillas de montar calientes; y al igual que la comedia de Mel Brooks, sus golpes cómicos son brutales".
Cinemania
"Para sus seguidores, es Seth MacFarlane en estado puro: una sucesión de sketches, más propios de sus series, deslavazados sobre todo al inicio de la película, con el propio creador dando la cara por primera vez"
El País
"Combinando algún que otro do de pecho escatológico con una inesperada fe en la pervivencia de la comedia clásica, la película no supera la energía y brillantez de Ted (2012), su opera prima, pero su gran ambición se ve razonablemente sostenida por un sobrio armazón de inteligencia cómica, quizá demasiado autorreflexiva a su pesar."
Rolling Stone
"Podría llamarse la Sillas de montar calientes del nuevo milenio, o podría denominarse de mal gusto".
Boston Globe
"Está claro lo que MacFarlane aspira a convertirse en el Bob Hope y el Mel Brooks de su generación. Pero los deseos de uno no siempre se cumplen".
Fotogramas
"(...) el cineasta se encuentra perdido dentro de su propio egotrip, incapaz de cederle espacio a sus secundarios talentosos y empeñado en combinar elementos tan antitéticos como la sal gruesa habitual con la distinción de un musical de la MGM."
Guia Del Ocio
"Seth MacFarlane hace de Mil maneras de morder el polvo una función, todo hay que decirlo, menos divertida de lo que ambiciona."
Metrópoli
"Una parodia construida con mucha inteligencia en la que se reformulan los personajes y tópicos que convirtieron el western en inmortal"
Variety
"Seth MacFarlane ha rodado una flácida farsa, plagada de estrellas. Un envoltorio elegante, que no contiene casi nada de valor en sus dos horas de metraje".