Documental del fotógrafo Schual Schwarz que se adentra en la cultura marginal de Ciudad Juárez para mostrar con duras imágenes y testimonios, la guerra contra las drogas.
El número de homicidios en Ciudad Juárez no deja de crecer en 2007 se registraron 320, tres años después 3622. El periodista fotográfico acompaña a Richie Soto, un agente del Servicio Médico Forense que clasifica los sangrientos sucesos de la ciudad y que, a pesar de dedicarse concienzudamente a su labor policial, no obtiene resultados. Se pueden ver madres a las que se les impide el paso en la escena del crimen llorando desconsoladamente al pensar que alguno de los fallecidos puede ser su hijo y calles vacías a las que la gente no sale por miedo, por las que apenas caminan los policías que renuncian a su puesto tras enterarse cada día de la muerte de uno de sus compañeros.
Pero también se refleja el otro lado de la moneda, representado por Edgar Quintero, un cantante de narco corridos de la banda Bukanas de Culicán que, en sus violentas canciones, idealiza a los narcotraficantes. Gente que los venera como si de estrellas se tratasen, pues sueñan con ganar las mismas desorbitadas cantidades de dinero que ellos.
Ninguno de los dos protagonistas está directamente vinculado en la guerra de la droga, ellos, como miles de personas más, viven el conflicto desde fuera, pero cualquier día pueden pasar a ser un número más en la extensa lista de víctimas.