Días de vinilo

Las vidas de Damián (Gastón Pauls, Nueve reinas), Facundo (Rafael Spregelburd, El crítico), Luciano (Fernán Mirás) y Marcelo (Ignacio Toselli, El amigo alemán), cuatro amigos de la infancia unidos por la música rock en vinilo, se ve alterada por los amores y desamores en el preciso momento en el que el primero de ellos les informa que se va a casar.

Damián es director de cine, tiene el guión listo para rodar su próxima película protagonizada por Leonardo Sbaraglia (Una pistola en cada mano), pero Vera (Inés Efron, Medianeras), una extravagante mujer que se cuela en su vida para ponerla patas arriba, pierde la única copia.

Luciano trabaja en la radio, las cosas no le podían ir mejor, sale con Lila (Emilia Attias, Matar a Videla) una cantante guapísima, pero sus celos le traicionan y provocan su separación. El locutor está devastado y quiere recuperarla, pero ella le contesta con una canción en la que describe todo lo malo que le caracteriza que se convierte en el éxito del momento.

Facundo cuida un cementerio privado. Su vida parece ser estable, lo que le lleva a decidir a casarse con Karina (Maricel Álvarez, Biutiful), pero a los días Lila le hace una propuesta, una que a su prometida no le gusta nada, componer un dueto.

Marcelo es el líder de una banda que versiona a los Beatles. Insiste a sus componentes en que se centren en el grupo y no se distraigan con ninguna relación amorosa, pero una peculiar mujer llamará a su puerta, resultándole imposible no contradecir lo dicho.

Días de vinilo es una comedia romántica con un telón musical de fondo y el amor como principal conexión de cuatro singulares tramas.