Producción gala que intenta combinar el gamberrismo burlón -no logrado- de Adam Sandler con la inocencia bonachona -fallida- de Steve Carrel..., ¿qué presagió?
Cada vez que, en una película francesa, leo "la mejor comedia del año, líder de recaudación en taquilla...," tiemblo pues ese formato de tan loable éxito en tierra napoleónica, pocas veces funciona fuera de sus límites territoriales y, esta vez ¡no iba a ser, como si lo fue "Intocable", una excepción!
El estilo innovador en su momento, ahora sobreexplotado y magníficado por doquier, de "El proyecto de la bruja de Blair" al servicio de la comicidad y la diversión supuesta pues si, en teoría y sobre el papel ya era una idea absurda, mema, garrula e infantil, en la práctica, este grupo de adultos Peter Pan jugando a "Cuenta conmigo" en la ciudad es ridículo, penoso, aburrido y de gran malasombra.
"Malditos vecinos" sustituido por un responsable pero, no-puedo-con-todo, babysitter que bebe de hermandades pro-americanas y con un obvio formato comercial ya saturado, invitación nefasta para la desfachatez y banalidad de una desquiciante noche de fiesta que se va de las manos, poco seso ni juicio ni cabeza para inventar algo más original y suculento que desmadre adolescente en treintaneros salidos, música a toda pastilla, tías enseñando tetas, una casa desvalijada, caos, desconcierto y exceso pueril y un video testimonial de tanta boba fechoría, absurda pantomina y la ineficiencia y gracia perdida en el cerebro hueco de quien pensó que esta historia valía la pena.
Un buen chico con amigos tontos que intenta hacer lo correcto tropezando con las ideas secas, estériles y cansinas de sus ridículos colegas, un jefe idiota que le utiliza, un crío problemático y un último beso de la chica y ¿debo divertirme?, ¿pasarlo bien?, ¿troncharme de risa?, ¡ si su mejor mérito es su corta duración!
Luego está la honorable puntuación otorgada y los comentarios halagadores de gran jolgorio que se leen sobre ella, mezcla exquisita del espíritu de "Proyecto X" y un "Resacón en las Vegas" lleno de gags ocurrentes de gran ironía social y..., estoy por volver al cine y comprobar que no entré en la sala equivocada pues parece que hablemos de dos películas antagónicas ya que, estos intentos baratos de copia sobre copia que no aportan nada sobran, aburren y duermen al personal por su inapetencia creativa, estancamiento de novedad, circularidad vomitiva y un "esto ya lo he visto" que no supera ¡lo ya visto!, para variar.
El impacto de un filme y la opinión subjetiva que se forma el espectador dependen, en parte, del certero acierto y diestra habilidad del director, aquí también protagonista, para exponer su trabajo y, del estado de ánimo y disposición del sujeto que la recibe aunque, también es cierto que, una buena comedia se identifica como tal porque es capaz de provocar la carcajada involuntaria y sonrisa inesperada en el rostro de quien mira no importa qué, quién ni dónde ni nada..., yo sigo esperando y no consigo levantar ese desánimo por lo ofrecido, desgana por lo consumido, incredulidad por la idiotez del espectáculo y fatalidad de elección para pasar el tiempo de ocio con ella pues, ni entretiene, ni alegra, ni cautiva, ni provoca sonrisa, ni tiene humor, sangre, chicha, locura digna, gracia ni ¡Dios que lo fundó!
Revuelto indigesto de sobras de comidas anteriores cuya torpe mezcla no da para mucho más de ver un desfile de bufones acróbatas que se mueven en la cuerda floja del ridículo, el disparate y la ñoñez y que dan ganas de darles un empujón para que caigan y se den ese porrazo merecido de una vez.
"Tonto es el que hace tonterías", que razón tienes Forrest Gump, ¡ejemplo vívido de ello!
¿Quieres películas de babysitter se-nos-ha-ido-de-las-manos de genial locura, espectacular juega y final acordado para que todas las piezas encajen? Papá canguro, Diario de una niñera, El canguro, La guardería de papá, Niñera a prueba de balas, Niñera a la fuerza, Poli de guardería, La niñera mágica, Señora Doubtfire, Un papá genial...,ves escogiendo, ¡hay donde elegir! y no precisamente ésta.