Crítica de SensaCine.com para Sleepy Hollow: American Horror Story

Adaptación del relato homónimo del escritor Washington Irving, narra los avatares de una población de inmigrantes holandeses para librarse de una antigua maldición, un jinete sin cabeza, el fantasma de un viejo soldado de la guerra de Independencia que regresa por las noches para cobrarse venganza. La entrada en escena de Ichabod Crane, un investigador científico llegado de la ciudad, plantea un problema entre las viejas tradiciones y la nueva ciencia, entre la superstición y el pensamiento moderno.

Al igual que Irving a lo largo de toda su obra literaria, en la película de Tim Burton se mezclan referencias del cine de terror europeo, especialmente de la productora Hammer Films, con un punto de vista más americano. A eso ayudan la aparición de acentos de todo tipo (imprescindible verla en versión original), con actores de las islas británicas y otros americanos. Es una película de gran despliegue escenográfico, con maravillosos escenarios oscuros, llenos de figuras retorcidas, como esos bosques llenos de árboles imposibles y de neblinas amenazantes.

Es posiblemente una de las cumbres del cine de Burton. Un ejercicio de estilo memorable, con actores icónicos (Depp, Ricci, Walken) y con la imaginación visual de Tim Burton, antes de que esta convirtiera en una fórmula en sus últimas películas.

A favor: La creación de un mundo único y original.

En contra: Su desarrollo puede parecer algo convencional.