Objetivo: Londres : los secretos del rodaje

En este film, Morgan Freeman interpreta al vicepresidente de los Estados Unidos. En Deep Impact (1998) era el presidente y en Invictus (2009) daba vida al presidente Nelson Mandela.

El guión de la película está escrito, entre otros, por el equipo formado por el matrimonio Creighton Rothenberger y Katrin Benedikt, también responsables del guión de Objetivo: La Casa Blanca (2013).

Los actores Aaron Eckhart y Angela Bassett han protagonizado ambos películas basadas en sagas de DC Cómics. Eckhart era Harvey Dent en El caballero oscuro (2008) y Bassett era Amanda Waller en Linterna verde (2011).

En el film, se utilizan tres frases de otras conocidas películas de acción. "Get to the chopper (Sube al helicóptero)" dice Banning, y que originalmente grita Arnold Schwarzenegger en Depredador (1987). "I'll be back (He vuelto)", dice Banning, una frase que se escucha a Arnold Schwarzenegger en la serie Terminator. Y también "That is the sound of inevitability (Ese es el sonido de lo inevitable)", que dice el Presidente Asher y que pertenece a Matrix (1999).

En el film, hay una escena de acción en particular que nos hace sentir como si estuviéramos en un videojuego de disparos en primera persona. Butler y un grupo de comandos se abren camino por una calle donde deben luchar contra los 'malos'. Se trata de una toma única, ejecutada de forma bastante creativa.

El film cuenta con dos pequeños cameos de los actores Jackie Earle Haley (RoboCop, Parkland, Lincoln) y Robert Forster (Alcatraz, Los descendientes, Héroes). Este último repite el papel del General Edward Clegg que ya hizo en la primera entrega.

Para promocionar la película, el actor Morgan Freeman pone su voz a la aplicación móvil Waze, un GPS donde se puede escuchar la voz del actor dando consejos como el vicepresidente que interpreta en el film. Por cierto que, Waze ha incorporado numerosas voces de celebridades como Darth Vader, Arnold Schwarzenegger y Mr. T.

Objetivo Londres está clasificada como película 'R' (fuerte contenido), por su lenguaje y su fuerte violencia.

Objetivo: La Casa Blanca (2013) recaudó más de 161 millones de dólares en 2013.

Los actores Gerard Butler y Angela Bassett fueron protagonistas de distintas películas de vampiros. Butler fue Drácula en Dracula 2001 (2000) y a Angela Bassett la vimos haciendo el papel de Rita Veder en Un vampiro suelto en Brooklyn (1995).

La secuencia de jogging al comienzo de la película que parece transcurrir en algún lugar cercano a la Casa Blanca, fue filmada en realidad en los jardines de Kensington en el centro de Londres.

El avión Boeing 747-200 usado en la película como Air Force One es el mismo que se usó en Casino Royale (2006).

Objetivo: Londres (2016) ocurre tres años después de los sucesos de Objetivo: La Casa Blanca (2013). Es decir, que han pasado los mismos años en la ficción que la realidad.

El actor Gerard Butler (Un buen partido, Coriolanus, Un ciudadano ejemplar), además de protagonista del filme, ejerce en esta ocasión como productor.

No es la primera vez que Aaron Eckhar interpreta a un político. En El caballero oscuro (2008), de Christopher Nolan, interpretaba a Harvey Dent, un político que quería limpiar las calles de Gotham de criminales.

En el trailer internacional se puede escuchar una versión ralentizado para piano del popular London Bridge.

Antes de ser elegido Babak Najafi para dirigir el proyecto, se barajaron los nombres de Fredrik Bond, Wayne Blair y Gary Fleder.

Además de en Londres, el rodaje del film tuvo lugar en otras localizaciones de Inglaterra como Langley Park en Berkshire. También el rodaje se realizó en Bulgaria, concretamente en Sofía y en los New Boyana Film Studios.

En 2013, llegaron a las pantallas Objetivo: La Casa Blanca, de Antoine Fuqua, y Asalto al poder, de Roland Emmerich. Se estrenaron casi a la par. La primera fue un éxito: costó 70 millones de dólares y recaudó 161. Mientras, la segunda fue una de las decepciones del verano en taquilla: cosechó 204 millones de dólares, pero su presupuesto era de 150. Probablemente el motivo fue que era demasiado pronto para ofrecer al público más de lo mismo.