Crítica de SensaCine.com para Fatima: Mujer musulmana empoderada

¿Qué significa ser mujer musulmana hoy en día en un país como Francia? Es una pregunta compleja que no puede contestarse con una simple frase ni siguiera con una simple película, pero Fátima, de Philippe Faucon intenta responder ofreciendo más interrogantes que certidumbres, a través de una narración calmada que intenta salir de la diversas encrucijadas que propone poniendo por delante la ternura y honestidad de su protagonista. El guión de Faucon, ayudado por Yasmina Nini-Faucon, Mustapha Kharmoudi y Aziza Boudjellal, y basado en la obra de la escritora Fatima Elayoubi, es un texto complejo y al mismo tiempo sencillo, cuyos mimbres dramáticos se apoyan en esos pequeños conflictos y erosiones cotidianas -que se resuelven en ocasiones como derrotas y en otras como triunfos- que vive una mujer musulmana en Lyon, madre coraje para dos hijas muy distintas, dos modelos de francesas de segunda generación, en un país también ensimismado en sus propias contradicciones identitarias.

La de Fatima es una historia de verdadero empoderamiento femenino, de mujeres que luchan contra las diferentes fauces opresoras de un sistema que margina a la mujer extranjera, cada una a su manera (desde la resignación a la búsqueda de sentirse integrada o el enfrentamiento rebelde); y que halla en las escenas íntimas y vulnerables de su protagonista los momentos más emocionantes (por verdaderos) de la película. El trabajo Soria Zeroual (Fátima) quizá sea algo irregular pero su dedicación y entrega traspasa la pantalla. Sucede del mismo modo con el resultado último del filme de Faucon, también algo tocado por un montaje narrativo extraño, que deja algún que otro episodio del relato colgando como un verso suelto, pero que a la postre convence en su apuesta por dar voz en la ficción a las dificultades de unas mujeres en tensión por el yugo de la tradición pero también por el de la (aparente) libertad que se les ofrece en Europa.

A favor: Su propuesta sencilla, de drama cotidiano, logra que Fátima sea una película poderosa.

En contra: Hay subtramas que no se resuelven y merecían más dedicación.