Últimas opiniones sobre La doncella (The Handmaiden)

Hace mucho tiempo que no veia una pelicula cargada de tanta crudeza, crudeza desde el punto de vista de como eran tratadas las mujeres en el siglo 30, es una historia entretenida , porque no decir, pero tambien cargada de filias sexuales incomprensibles para esa epoca, la represion sexual, las traciones y chantajes, un alto grado de poder sexual y erotismo lesbico, mentiras y falsedades, el retrato de los hombres como los enemigos y las mujeres intrincadas amandose y superando todos los obstaculos para estar juntas y ayudandose mutuamente, es bellisimo y salvajemente sexual.

La pasión puede con todo tipo de mentiras y humillaciones". La doncella es una película embustera, cuando te estás haciendo un juicio sobre lo que ves en pantalla, te golpea y da vueltas las cosas. La pasión y la humillación están presentes durante toda la cinta, y juntas nos entregan un recital de erotismo, amor y resiliencia. El trabajo del director Park Chan-Wook es excelente, levantado una ambientación victoriana estéticamente envolvente. Una película en la cual su sinceridad reside en el deseo y pasión que desborda.

Como siempre, todo lo bueno tiene un final, La Doncella, es ese gran final, el punto culminante de la carrera del director surcoreano Park Chan Wook.

Aunque la película dura unas dos horas, nunca te aburres, siempre hay acción, suspense y tensión (sexual). Además los sets dónde se filmó la película son un personaje más y la actuación de los actores principales ha sido exquisita.
Un filme que no es el típico filme comercial, sino que es para cinéfilos y amantes del cine un poco más refinados.

La estética y la puesta en escena de este artista coreano es alucinante. Sus obras te ofrecen siempre algo nuevo que nunca antes has visto en la pantalla. Otra cosa es que pueda gustarte, pero el tío tiene la imaginacIon suficiente para no repetirse. En este caso se trata de un thriller con tintes eróticos tan fascinante como alargado, que va mostrando sus cartas poco a poco. En su segundo capítulo se repite un poco y en el tercero y último se pasa de rosca truculenta. Con todo es diferente e imaginativa.

"La doncella" de Park Chan-wook cuenta la historia de un timo en el seno de una mansión imperial. Estamos en los años treinta del siglo pasado cuando Corea del Sur está dominado por los japoneses. La acción se desarrolla entre tres personajes: un falso conde compinchado con una chica de baja condición que se hace pasar por una doncella; la señora de la mansión que está encargada de leer los libros de erotismo a su tío y los señores invitados. En caso de portarse mal o de intentar huir los castigos pueden ser muy violentos encerrada en las mazmorras, pues el tío tiene una mala leche bestial.

La historia se desarrolla en tres partes. En cada una de ellas se va desvelando una trama diferente que te deja pendiente, pues el punto de vista va cambiando en cada situación y las partes, donde las imágenes se van solapando con puntos de vista diferentes. spoiler: En la primera, el falso conde está trama una argucia con la sirvienta para que éste consiga seducir a la señora, se case con ella y luego la den por loca dejándola en la estacada en un manicomio y llevándose la pasta; en la segunda, la situación da un vuelco y resulta que el conde está de parte de la señora y a quien dejan de lado es a la sirvienta que la meten en el loquero, sin embargo, en la última parte es el falso conde el que sufre las consecuencias del engaño y es entregado al tío para que sea ajusticiado con total agresividad. Por lo tanto
, las imágenes se van solapando en las diferentes partes para dejar ver las estrategias de los diferentes personajes con perspectivas de la trama que van cambiando en beneficio de uno u otro personaje. En definitiva, se teje una red de situaciones que te van dejando con sorpresas, aunque no estaría nada mal haber recortado el metraje de la cinta para hacerla más ligera.

Casi me quedo sin verla. La habían quitado de todos los cines. Y de repente veo que la tienen en un pequeño cine de Madrid, y voy.
Y me alegro porque me ha parecido una experiencia muy diferente. El cine asiático tiene un tono distinto al occidental, y el erotismo japonés es tan atrayente como perturbador spoiler: (refiriéndome a los relatos que Hideko leía)
.
Aunque es larga, si disfrutas del lado más oscuro de las personas (y cómo en mi caso, si también lo haces con los paisajes exhuberantes, los escenarios cuidados, y los planos que parecen el escenario de un teatro) no te importarán sus casi tres horas de duración.

De entrada nos plantea un juego de argucias que podría ser un thriller interesante y nada más. Pues no, estamos ante una obra que vuela más alto apostando firmemente por una mezcla de géneros a la vez que también nos muestra la trama desde los diferentes puntos de vista de cada personaje. Encontraremos un drama romántico con la intriga de un thriller, un cine erótico bellísimo aderezado todo ello con toques de oscuros irónicos que convierten la película en una ajustada y acertada combinación. A este primer éxito se le deben sumar unas imágenes cautivadoras con unos movimientos de cámara que refuerzan perfectamente la tensión dramática. Una tensión dramática que se va mostrando en cuentagotas con varios giros que te mantienen en un desasosiego incómodo y atractivo a la vez.
El juego de la mentira permanente se compagina perfectamente con la perversión obsesiva y dominante de un tío que vive esclavo de sus delirios enfermizos en una mansión muy particular, la que también se convierte en un elemento protagonista lleno de misterio y simbolismos. Si a todo lo anterior se añade una música que cautiva y unos intérpretes de miradas y gestualidades que aportan una generosa sensualidad, sin quererlo, estaran disfrutando de una montaña rusa de emociones que en ningún caso os dejará indiferentes y que aproximan la cinta a una merecida la excelencia. La única carencia que encuentro a esta maravilla es el ansia permanente del director Park Chan-wook de marcar estilo en un perfeccionismo que a veces puede llegar a molestar y todo.
Un regalo para los sentidos y el cine que desde la perversión, la seducción y el engaño nos muestra una profunda humanidad en todo su espectro de tonalidades. (9/10)

Tras el pequeño descalabro que supuso su aventura estadounidense llamada 'Stoker', Park Chan-Wook vuelve por sus fueros demostrando que a pocos realizadores actuales se les da tan bien los guiones enrevesados como a él. Estamos ante una película muy ‘arty’ de alto voltaje, que retrata con crudeza el trato que se daba a las mujeres en Japón y Corea a comienzo de siglo. Una historia muy oscura, que contiene imágenes lésbicas de alto voltaje, que nos muestra todas las filias y fobias sexuales de los asiáticos. El director coreano muestra, una vez más, cómo abordar un tema tan espinoso de la manera más elegante posible y sin renunciar a sus momentos de humor.