La Mejor Película Original del Año
Lo más dificil no fue ingresar al teatro, lo más dificil es salir con vida de él. Del segundo uno al minuto ochenta y ocho: este es el lapso de tiempo que estarás hundido - literalmente, aguantando la respiración - dentro del asfixiante y perturbador home invasion de uno de los grandes del terror moderno, Fede Álvarez. Orgullosamente latino, Álvarez logró un raudo salto a el prodigioso Hollywood por medio de un cortometraje sci-fi subido a Youtube en 2009 llamado "Panic Attack!", básico pero superlativo planteaba una invasión de robots a Montevideo, Uruguay. Pocas semanas después, Ghost House Pictures le propuso dirigir el codiciado remake de "Evil Dead", colosal obra considerada como la opera prima oficial del talentoso director dentro del cine estadounidense. Después de las altas expectativas que cosechó luego de la experiencia cinemática casi perfecta en 2013, el uruguayo se interna en el terreno del thriller para obnubilarnos con una propuesta tan sencilla como compleja, un filme de culto y una patente muestra de que las mentes brillantes y originales aún existen.
A partir de la tenebrosa primera toma no lineal, con un descenso lento en picado hacia el foco de atención, "Don't Breathe" promete una salvaje travesía bien medida lo suficientemente inteligente para deleitar tanto a los fans del género como a los adictos de adrenalina con un terror psicológico y físico que te dejara sumergido en un estado catatónico aproximadamente por el resto de tu vida. Sin la necesidad de un dialogo intrincado y sub-tramas que no le aportan nada a la historia, la introducción de los protagonistas pasa en un abrir y cerrar de ojos, un par de escenas que tendrán peso a lo largo del metraje y ya estaremos dentro, sin salida. Un grupo de jóvenes con diferentes motivaciones perpetran propiedades privadas desocupadas a lo largo del verano, a pesar de que estos no acarrean demasiada trascendencia puesto que lo hacen sin cometer infracciones verdaderamente graves. Condicionados a que será su último robo debido a las magnitudes económicas que este conlleva, los jóvenes acometen contra la desolada morada de un veterano militar ciego en Detroit, una ciudad que se ha visto afectada por descontroles sociales y económicos, la ciudad fantasma perfecta para ejecutar un atraco. Luego de estar dentro de la casa, un torbellino de acontecimientos inesperados se producirán descontroladamente, comprobando que en la tierra de la oscuridad, el ciego es rey.
Bajo un guión concebido por Fede Álvarez y su recurrente colaborador Rodo Sayagues, el filme se escabulle deliberadamente entre los limites personales de cada personaje para gradualmente desvelar quienes son las verdaderas presas. Los estándares narrativos de este dúo no tienen mesura, ni tampoco estancamientos imaginativos dado a que aprovechan cada mínima oportunidad para turbar con profesionalidad y empeño natural. La curiosidad por ver el resultado final de una premisa tan sencilla y nada embrollada corrompía mi mente, y con razón, esto es una genuina obra del suspense y terror. Como fan del género, es una categórica convicción contemplar el inesperado resurgimiento de ideas originales para vivificar interinamente el hostigado y derrochado mundo del horror, aunque, no cabe duda que tanto la simplicidad y efectividad de "Don't Breathe" serán remedadas cínicamente en futuros filmes.
El fluido manejo del espacio es vital brío para aunarnos con el escenario de la historia. Al igual que su aspecto argumental, el filme nos hilvana la idea de tener una geografía limitada sobre la casa, empero, Alvarez y su equipo encuentran maneras de hacer a los espectadores conscientes de los claustrofobicos callejones sin salida dentro de la morada. Desde el comienzo, el movimiento de la cámara ejecuta enfoques específicos hacia elementos o lugares claves para la trama posteriormente, con el fin de situarnos en el tenebroso e incoloro ambiente del sótano, la sala, el armario o los tubos de ventilación.
Para la asfixiante y opresiva atmósfera fueron necesarios dos cimientos con excelentes terminaciones. Roque Baños es el autor español responsable de la tensionante banda sonora que acompaña a la segunda característica primordial, la fotografía. Pedro Luque - también uruguayo - embellece magistralmente los espacios del set con componentes bien medidos como la luz, el brillo, la sofocante angulación y los limitados efectos. Seguro recordaras, la escena de persecución en la oscuridad, algo al estilo neo-noir , sin duda, de las mejores del año, en la tierra de la oscuridad, el hombre ciego reina y ahora cada ser humano con cinco sentidos estará mas propenso que el preparado invidente.
"Don't Breathe" se apodera de cada herramienta narrativa y visual a su alcance, no se preocupa por complacer a los criticos espectadores porque involuntariamente lo logra. La mejor película original del año ejecuta una narrativa intrigante, una estructura de supervivencia flamante, innovaciones tremendas para el horror que te tendrán pegado a la pantalla y el desarrollo constante de una nueva mezcla de géneros cinematográficos ("Green Room" & "10 Cloverfield Lane"). Impecable, original, sencilla y concisa, estremecedora, impactante, alegórica, tenebrosa, fastuosa, asfixiante. Fede Álvarez nos debía un experiencia cinemática perfecta después de "Evil Dead", "Don't Breathe" lo es, puro cine.