Está basada en una historia real que traspasa el cuento de hadas.
El territorio situado entre Egipto y Sudán es Bir Twal, no está muy lejos del mar Rojo y es conocido como “terra nullius”, un lugar que no pertenece a nadie, a raíz de una disputa de tierras hace décadas entre los dos países de alrededor.
Heaton trabaja en la industria minera y postuló para el Congreso en 2012. Espera poder utilizar esa tierra como un ‘banco de pruebas’ para el avance científico y ayudar a mejorar la seguridad alimentaria mundial: “uno de nuestros principios fundamentales sería la de compartir la comida y los recursos que desarrollamos con otras personas de la región”.