El director ha dicho que la idea de la película se le ocurrió cuando estaba editando su primera película en una sala oscura, "en un momento el equipo falló y solo escuchaban el sonido, sin ver ninguna imagen. Y había algo conmovedor en eso. Así que empecé a pensar en una película que empieza en el interior de la silenciosa cabeza de un ciego".
El productor Oren Moverman y el director Ido Fluk eran amigos tiempo atrás de colaborar en esta película. Se conocieron cuando Fluk trabaja en una revista y tuvo que entrevistar a Moverman, quien se ofreció a leer su guion y acabó enviándoselo a otro productor, Lawrence Inglee.