Gabriel Ripstein, director de este trabajo, es el hijo del laureado realizador mexicano Arturo Ripstein y nieto del productor Alfredo Ripstein. Sin embargo, aunque reconoce que "la sangre es espesa, y empuja", afirma que pasa ser cineasta hay que "ser terco e insistente y tener un poco de suerte y otro poco de talento", y no solo un padre famoso.
La película fue seleccionada para representar a México en los Oscar 2016, como nominada a Mejor Película de Lengua Extranjera.
El film ha obtenido multitud de nominaciones en importantes festivales -como el de San Sebastián o el de Edinburgo- y premios como el de Mejor ópera prima en el Festival de Berlín 2015, Mejor Actor (para Kristyan Ferrer) en el Art Film Festival 2015 y Mejor Película Mexicana en el Festival de Guadalajara 2015.