Para conseguir el dinero suficiente para los efectos especiales del film, así como para la banda sonora y otros elementos de la post producción, se inició una campaña de crowdfunding en Kickstarter, que logró recaudar 32.001$ sobre la cifra de 30.000 que pedían.
Este es el segundo largometraje de Benjamin Dickinson, quien también empleó la web Kickstarter para poder realizar First Winter, su primera película.