Estamos ante otro ejemplo de lo que debe y lo que no debe hacer el cine español (porque sí, es una película española por mucho que algún ignorante bocazas proclame todo lo contrario
- Lo que debe hacer, porque tiene una buena promoción, y un tráiler bien hecho y atractivo.
- Lo que no debe hacer, porque lo que promociona es un producto cuando menos decepcionante, dejándonos una peligrosa sensación de engaño.
Me gusta (más o menos) la historia que se supone que nos quieren contar, pero no me gusta la película.
Todo se ve falso y poco o nada creíble. Desde la omnipresente y artificial lluvia, pasando por la trama en sí misma, hasta las actuaciones de sus intérpretes. Un claro ejemplo del pésimo uso y abuso de los elementos es precisamente esa lluvia (dudo que en ningún sitio del mundo llueva tanto), que en buenas manos podría y debería haber resultado un elemento narrativo que ayudase a crear una atmósfera opresiva y deprimente, y sin embargo resulta tan artificiosa que no hace sino restar aún más credibilidad a todo el conjunto.
A la mayoría de los actores habría que subtitularlos porque no se les entiende, y cuando se les entiende se limitan a declamar como si estuvieran leyendo un texto. Claro que los diálogos, artificiales y más propios de lenguaje de literatura de consumo que de cine, no ayudan demasiado. Mal éste muy común entre los actores españoles ( y navarros y vascos también).
Son tan malas en general las interpretaciones (que deberíamos llamar actuaciones por lo mucho que cantan), que es imposible meterse en la historia. Pero es que además la historia en sí está tan mal tramada y tan mal contada que acabas por que no te importe quién es el asesino o cuáles son sus motivaciones. Tampoco te interesan los traumas infantiles de la protagonista, ni su desesperación por quedarse embarazada, ni su oscura historia familiar. Y no interesa, porque tampoco saben muy bien para qué te los cuentan, o qué aportan a la trama.
Marta Etura, que lleva todo el peso de la película, lo hace como puede, y casi te la crees siempre y cuando no tenga que hablar. Supongo que más por culpa de una pésima dirección de actores ( y de todo lo demás) y de la pomposidad y ridiculez de los diálogos. Ningún actor en sus cabales puede creerse esas frases interminables, vacías y redundantes que suenan a folletín barato.
Sólo Elvira Minguez resulta convincente y consigue sacar adelante su papel. Triste, muy triste.
Pésima dirección del señor González Molina, peor fotografía, mal guión, muy mala narrativa, malas interpretaciones, personajes huecos, banda sonora desacertada,….Un refrito mal mezclado y apenas cocinado por un pinche de cocina jugando a gran chef. Mucha parafernalia para tan poco contenido. Cine con dinero y sin talento.
Todo eso es El Guardián Invisible, una película que si bien no acaba de aburrir del todo, ni engancha ni interesa, sólo transcurre. Quizás hubiera podido funcionar como serie de televisión sin demasiadas pretensiones, pero flaco favor hace a los intentos de grandes producciones para el cine en este país nuestro.
Dudo que acaben la trilogía, en cualquier caso, ya han perdió un espectador. Sobre todo porque aún no me ha quedado claro lo de las galletas esas en el chirri, también llamado pubis, que era lo que más me interesaba…a si contenían algún tipo de sustancia y por eso veían en esa familia las cosas que veían, o si los Salazar eran familia de las Azucar Moreno. Gran misterio.