Es la segunda película biográfica del director tras Ali (2002).
Michael Mann es un gran seguidor de la marca Ferrari. Tiene tres vehículos de esta marca: un 99 GTB Fiorano, un 599 GTO, y un F12 Berlinetta.
En un principio, Christian Bale fue la primera opción para encarnar a Enzo Ferrari, pero el propio actor declinó la oferta. Esto fue a causa del aumento de peso que implicaba realizar este papel, algo que podría afectarle negativamente a su salud.
El proyecto comenzó hace diecisiete años de la mano de Michael Mann y la colaboración de Sydney Pollack.