Para este papel, Danny Boon ha tenido que utilizar los servicios de la famosa doble de acción y coreógrafa de lucha Alain Figlarz. El actor comenzó junto con el director una formación intensiva de pesas, tiro y escalada mientras comían clara de huevo y queso.
Danny Boon aseguró que había perdido 15 kilos de grasa y había recuperado 10 de musculatura.