"Déjame Salir" es un soplo de aire fresco dentro del terror actual. Sorprende que una película del género, haya ganado un galardón de este calibre, y es que el director y comediante Jordan Peele demuestra que aún pueden surgir ideas frescas y originales de un género que muchos consideramos, se ha hecho de todo y no hay nada mas que ofrecer. Juega con una aparente trama simple, de revelación de bandos predecible, para proteger su gran giro final de ciencia ficción, sirviendo, a su vez, como crítica a la hipócrita sociedad estadounidense a través de un caso familiar particular, que, como todo elemento de la cinta, se muerde a sí misma la cola transformando una exposición cómica del racismo en un sectarismo de contrarracismo.
Es de admirar como logra incluir al público, manteniendolo siempre alerta a lo que puede pasar y finalmente como da vuelta la historia inicial a la que fuimos inducidos y engañados de forma magistral. La historia nos permite entrar en la cabeza de Chris, en su desesperación y su intento de superar el ataque que le provoca todos los sucesos. La cinta te genera una incomodidad desde la llegada a la casa de los suegros, dentro de la aparente tensa calma se esconde la oscuridad que de a poco se devela, sin prisa pero con la brutalidad que los fanáticos del genero gore podrían amar. Su encanto precisamente proviene de su ambiente sombrío donde los actores juegan un gran rol con una credibilidad y manejo de una película simple pero que está desarrollada con ingenio.
Las actuaciones son más que notables. Daniel Kaluuya y Allison Williams están exorbitantes, principalmente Kaluuya, que logra un buen papel en su rol protagonico y que para mi logra transmitir esa sensación de incomodidad, desespero y horror ante la situación que lo aborda. Por otro lado la familia Armitage logra desempeñar un rol muy oscuro y a la vez amistoso que hasta logras simpatizar con ellos y caer convencido de sus extrañas actitudes.
Jordan Peele construye un suspenso que es extraordinario, psicológico, intimista, astuto, lleno de silencios, y sostenido con el gran labor de montaje que propina los cortes justos en cada escena.
En definitiva, es una cinta que tiene escenas de muy buena tensión, horror psicológico, y hasta cierto punto crea esa atmósfera opresiva y tétrica bajo un ambiente tranquilo y aparentemente amistoso que hasta se siente esa incomodidad absoluta, y como dice el título, dan ganas de salir ahí. El manejo del horror psicológico simplemente me gusto y mucho.