Mi cuenta
    Los asesinos de la luna
    Nota media
    4,0
    186 notas
    ¿Tu opinión sobre Los asesinos de la luna ?

    37 Críticas del usuario

    5
    7 críticas
    4
    14 críticas
    3
    8 críticas
    2
    4 críticas
    1
    2 críticas
    0
    2 críticas
    Ordenar por
    Mejores críticas Últimas críticas Usuarios que han publicado más críticas Usuarios con más seguidores
    GerardJR
    GerardJR

    1 críticas Sigue sus publicaciones

    5,0
    Publicada el 14 de noviembre de 2023
    Cortázar decía que la cultura es el ejercicio profundo de la identidad, y añado que no solo la individual, también la colectiva. Algo que Scorsese ha trabajado incansablemente al teñir cada película suya, por muy distintas que sean entre sí, de una búsqueda del ADN de la identidad norteamericana.

    Pero Estados Unidos, o mejor dicho, los poderes que los rigen, se resisten a dar una imagen de su identidad completa, y solo nos muestran esa cara amable de lucha por tus sueños y lo conseguirás que hizo y sigue haciendo de Hollywood la fábrica de sueños por excelencia.

    Pero todos sabemos que por muy fácil que se pueda conciliar el sueño, nadie se libra de las pesadillas. Y allí entra Scorsese, para poner en primer plano esas pesadillas que se quieren esconder debajo de la alfombra.

    Una labor de hacer visible lo invisible que el director italoamericano traslada también a su faceta de amante y devorador de cine, allí está su World Cinema Foundation, preservando y restaurando esas obras del cine mundial que han quedado olvidadas.

    ¿Y qué es Killers of the flower moon si no el rescate de una realidad olvidada? Una cara oculta de la luna de tres horas y media para que los que la veamos no la podamos olvidar.

    Y es que algunas historias empañan el relato que un país quiere contar de sí mismo y si no se ponen en imágenes, sino se relatan en un programa radiofónico, sino se relatan en un libro, quedarán olvidadas. O lo que casi viene a ser lo mismo, escondidas entre el catálogo infinito de una plataforma de streaming.

    Y la manera de resistirse de Scorsese es haciendo una película monumental sobre el asesinato y saqueo de la tribu de los Osage, premiados y maldecidos con ese oro negro que solo provoca fiebre. Y lo hace con una empatía, que no simpatía, hacia sus personajes, solo comparable a su amor por el cine.

    Podría hablar de las interpretaciones, de la puesta en escena, o de ese bajo de Robbie Robertson que nos prepara para lo peor, pero sería reiterar lo que ya se ha dicho de esta obra maestra, y prefiero que lo descubráis vosotros mismos viéndola.

    El nuevo Hollywood ahora es el viejo Hollywood, pero Scorsese parece haber visto ya a ese búho que augura el final, y hará todo lo posible para que mientras esté en sus manos, él no lo vea morir del todo. Y nosotros estaremos allí para celebrarlo.
    Olimpia M.G.
    Olimpia M.G.

    2 críticas Sigue sus publicaciones

    4,5
    Publicada el 15 de noviembre de 2023
    *Quiero entrar en el sorteo de una camiseta de SensaCine. ¡Gracias! 😊

    Aunque desearía poder haber sido parte de aquellos espectadores que hace ya casi medio siglo tuvieron la suerte de presenciar el inicio de la carrera de uno de los mayores genios del cine, me contento con ser parte de la generación que está siendo testigo de la que es su nueva época dorada. Si bien es cierto que, a pesar de la larga duración de las huelgas de los actores y guionistas y todas las repercusiones que ha tenido en las salas de cine de todo el mundo, estos meses no nos han faltado películas para conmovernos, despertarnos y sentir toda una paleta de emociones, hacía tiempo que una película no despertaba en mí tanto interés. Sigo dando gracias por poder ver en una sala de cine obras como ‘Oppenheimer’ o ‘Dune’ y poder verlas en una gran pantalla tantas veces como quiera, y ‘Los asesinos de la luna’ no se queda corta tampoco.

    Pero esta vez ya no solo se trata de la expectación o de ver cómo se ha adaptado un libro querido o de la confianza que se tiene en un director, sino que también hay algo de reivindicativo y de esperanzador. Mentiría si dijera que sabía siguiera quiénes eran los Osage antes de conocer esta historia, pero a través de un relato crudo y que, consensuadamente, es fiel a una tragedia que desmembró a tantas familias y que no fue traída a la luz lo suficiente, tanto yo como muchos otros hemos podido conocerla, cosa que, muy probablemente, sería precisamente una de las intenciones principales de la producción. Y esto no sería posible – o por lo menos no sería tan efectivo – sin contar con los actores predilectos del señor Marty. Ojalá sigamos teniendo muchos años por delante para disfrutar de Robert DeNiro y ojalá sigan dándole papeles de lobos con piel de oveja maquiavélicos, porque no hay nadie como él. Leonardo tampoco se queda corto en un papel que, aunque a primera vista parezca simple y hasta provoque cierta repulsión, demuestra ser mucho más complejo haciéndonos debatirnos entre la simpatía y el asco, siempre en busca de una redención que nunca llega a ser merecida. La química entre ambos es innegable y a veces hasta se ve impregnada de un toque de humor agradecido que viene bien para respirar entre atrocidad y atrocidad.

    Mi sorpresa favorita ha sido, sin ninguna duda, la maravillosa Lily Gladstone. Creo que esta ha sido una de esas veces en las que he estado muy segura de lo que significa una interpretación digna de Oscar y apuesto a que, si los dioses del cine serán justos, ella será una de las nominadas del año que viene. Visceral, sólida e impetuosa, su actuación llega a lo más profundo del corazón, apelando a una empatía proporcional a la indignación de lo que ocurre a su alrededor, en gran parte causa de su marido.

    Podría parecer que exagero si digo que 3 horas y media no se me han hecho largas, pero, aunque sea subjetivo, creo que, si la sorpresa del final se hubiera alargado incluso un poquito más, me habría quedado sentada con gusto en mi butaca. Por ahora, seguiré adentrándome en el historial de obras de Scorsese hasta que llegue a sus principios y esperando a que anuncie su próxima producción.
    Unai VL
    Unai VL

    2 críticas Sigue sus publicaciones

    4,0
    Publicada el 14 de noviembre de 2023
    Killers of the Flower Moon ( Martín Scorsese, 2023) conforma un profundo y excepcional retrato tanto del mal como de la codicia, racista y sin límites, del hombre blanco. La obra transcurre durante sus tres horas y media tejiendo una tela de araña alrededor de su eje principal (DiCaprio y Gladstone) donde se nos describe tanto su vida cotidiana, como sus relaciones con el entorno y sus experiencias propias para conformar, en base a ellos dos, una fotografía sobre la situación americana. Hombre blanco con mujer osage. Este tándem delimita las bases de aquella América ciega por el petróleo y el racismo que se servía de los matrimonios para chupar toda la sangre y derechos de los osage. La convivencia como método de tortura invidente, una forma de apaciguar a las bestias salvajes antes de cazarlas.

    Intentemos hacer una metáfora explicativa (espero) de la estructura y funcionamiento narrativo de la película. Si el gran retrato de la sociedad americana fuese el Sistema Solar, los planetas serían los diferentes personajes, figuras y situaciones que conforman cada retrato particular, y el Sol, el centro de aquella sociedad, lo que todos rodean, la pareja principal, osage y hombre blanco. Por lo que, la película de Scorsese no es un núcleo cerrado, sino uno que se expande continuamente enseñando distintas caras de la moneda. Siempre circulando en base a unos mismos propósitos crueles y malvados que harán de la pareja protagonista una suerte de desdichas.

    Así, surge esta película- denuncia que cuanto más se aleja de El nacimiento de una nación (Griffith) más se acerca a Pozos de ambición (Paul Thomas Anderson) en cuanto a su temática. Porque claro, para encontrar semejantes formales al filme de Scorsese, tienes que retrotraerte a su propio cine, y aún así, te quedas falto. Esto es lo que hace que sea una película tan dura y difícil de pensar. El sello autoral de Scorsese lleva pulido años, aunque parezca que nunca acaba de completar su evolución. Por ello, la película almacena toda la sabiduría de su director, aquí tornado en un estilo menos agitado, menos torrencial, más calmado y en mi opinión, menos convencido de sí mismo. Es decir, compruebo en ciertos momentos una necesidad de su director en subrayar continuamente sus propuestas, aclarando una y otra vez el mismo mensaje, que probablemente, ya había sido recibido por el espectador.

    El problema que surge de toda esta habladuría y descripción, en lo personal, es que me quedo falto y deseoso de alma, de emoción. En su larga duración no consulto la hora, pero no descubro ningún cosquilleo ni fascinación como descubría no hace tanto en El Irlandés (2019). Y, esque alomejor, esto es intencionado. Porque parece que Scorsese quiere que estemos continuamente perdidos en su relato. Tan fríos como el ambiente en aquel pueblo al que están violando, sin saber de quién desconfiar o en qué confiar, cuando lo que sale por la boca de los personajes no es lo mismo que hacen sus manos. Probablemente, Scorsese quiere que entremos en el último aliento de una cultura que jamás volvería, sin dejar paso a nada más que la deshumanización y frialdad de ese mundo en ruinas. En todo caso, pido sentir algo más, y a lo mejor estoy obrando mal, pero me gustaría sentir el alma de la película cerca mía como tantas veces ha conseguido su director. La considero, finalmente, una película excelente, pero que tiene un agujero en su interior, o que yo por lo menos, no lo he podido rellenar.

    Quiero participar en el sorteo de un camiseta de Sensacine
    dancingwolf FF
    dancingwolf FF

    Sigue sus publicaciones

    3,5
    Publicada el 13 de noviembre de 2023
    El oro negro empezó a brotar de las entrañas de la tierra, y de la noche a la mañana, los Osage se convirtieron oficialmente en el pueblo con la renta per cápita más alta de todo el mundo, según se dijo. Pero allí donde brota la riqueza aparece también la avaricia, evidentemente.

    La última película de Martin Scorsese adapta la novela de David Grann “Killers of the Flower Moon: The Osage Murders and the Birth of the FBI”. Que este espectador no ha leído, pero podemos adelantar que la versión cinematográfica toca de forma muy tangencial la creación de la agencia de J.E. Hoover, centrándose casi por completo en la tragedia que sacudió a los Osage. Y esto probablemente sea un acierto, porque la historia tiene suficiente enjundia por sí misma como para no necesitar subtramas farragosas que seguramente desviaría la atención del tema en el que Scorsese quiere poner el ojo (y porque si no igual nos iríamos a las 6 horas de metraje, y a lo mejor acabábamos cansados). Estamos ante una historia de pura codicia, representada en la figura paternalista del potentado William King Hale -Robert DeNiro- y su sobrino Ernest Burkhart, Dicaprio, un tipo sin muchas luces que acaba metido hasta el fondo en la maraña urdida por su tío. Mayormente sabiéndolo y queriéndolo, pero a veces uno diría que queriéndolo sin querer saber. No sé si me explico. El triángulo protagonista lo completa Mollie, la mujer Osange que se convertirá en la señora Burkhart y pieza esencial, para su desgracia, del entramado criminal (interpretada por la magnética Lily Gladstone, a cuyo Oscar ya deben de estar sacando brillo).

    Vaya por delante, por si algún despistado no se lo imagina en el contexto de las tres horas y media que dura la película, que aquí estamos ante el “nuevo” Scorsese, el Scorsese crepuscular; el que echa pestes contra los productos de entretenimiento vacíos que inundan las carteleras de todo el mundo y reivindica un cine libre, un cine exigente que plantee desafíos morales al espectador y le convierta en un elemento activo. Es algo que el viejo perro (lo digo con cariño, me encantan los perros y me encantan los perros viejos) lleva haciendo toda su vida, sólo que en los últimos años ha bajado sensiblemente las revoluciones, y aunque prosigue con su labor de mostrarnos las bajezas, flaquezas y mezquindades de la más variopinta calaña humana, mantiene el tempo relajado que ya vimos en “El Irlandés”. La ausencia de narrador en primera persona crea algo de distancia, pero lo que tenemos aquí una vez más -igual que en “Uno de los nuestros”, “Casino”, “El Lobo de Wall Street”) es una historia de gente sin escrúpulos narrada fundamentalmente desde el punto de vista de ellos mismos. ¿Será que es el que nos resulta más atractivo?

    Reconozco que no es mi Scorsese preferido. Y reconozco que “Los asesinos de la luna” pasa ante nuestros ojos con una cadencia envidiable para una película de su metraje y de su orografía narrativa. Pero, qué puedo decir; me reconozco vulgar, y echo de menos a aquel Scorsese espídico, gamberro y excesivo cuyo cine se disfrutaba como una montaña rusa en un parque de atracc… ejem, perdón. Comparación desafortunada.
    Lorenzo rodriguez perez
    Lorenzo rodriguez perez

    3 críticas Sigue sus publicaciones

    4,5
    Publicada el 13 de noviembre de 2023
    Killers of the flower moon

    Martin Charles Scorsese. 80 años. Nueva York. Más de 50 años mostrándonos de todo lo que es capaz y una vez más nos regala una película que perdurará para la posteridad. Él sabe que nos ha dado mucho, pero no contento con ello, entregado a su trabajo, se toma su tiempo para transmitir todo lo que guarda en sus pensamientos, con la precisión de un joven cirujano junto con el cariño y veteranía de la mejor abuela cocinera.

    La cinta abordará un trágico suceso de la historia reciente americana. El poblado indio Osage se volverá el más rico per cápita del mundo debido a la ingesta cantidad de petróleo bajo sus tierras, esto atraerá a personas indeseadas llenas de ambición que harán todo lo posible por arrebatárselo. La película está basada en el libro homónimo: Killers of the Flower Moon: The Osage Murders and the Birth of the FBI, de David Grann. Nos encontramos ante una de las películas más críticas y reivindicadoras del director contra del racismo y la discriminación. En este caso se centra en el pueblo Osage pero también constata que no son el único lugar del Estados Unidos donde sucede esto, ya que nombra el trágico suceso de Tulsa.

    En cuanto a las actuaciones escribo a falta de ser capaz de poder expresar de manera más apropiada lo verdaderamente increíbles que son las interrpetaciones de Lily Gladstone, como Mollie Burckhart y Leonardo DiCaprio, como Ernst Burckhart. Robert De Niro como Ray Bill esta espectacular, tampoco se queda atrás, pero la naturalidad de Lily y explosividad de DiCaprio durante toda la película es apabullante.

    Si tenéis la posibilidad de volver a ver la película o verla por primera vez, me gustaría que os fijéis en una secuencia que para mí resume a la perfección la esencia de la misma. En esta escena podemos obtener una analogía entre Ernst, con los extranjeros y Mollie, con el pueblo Osage. Scorsese hace referencia al título original de la película, flor de luna, que viene de la lengua de los indios americanos para dar significado al eclipse.

    Pasada la primera hora, Mollie se niega a que los médicos le pongan la insulina y pide a Ernst que los eche de casa. La iluminación que hay es su cara a lo largo de las secuencias es simplemente maravillosa. Mollie cansada, sentada a un lado de la cama, entre la pared y su marido, atrapada. Durante esta discusión DiCaprio tapará la luz exterior dejando en completa penumbra el rostro de Mollie. Este juego de luces, relacionado con que sea justo Ernst quien lo realice, siendo un reflejo de la sociedad, a veces ciega de poder, a veces desinteresada, falta de ética y nunca tomando responsabilidad de sus acciones. La convierten en una de las mejores secuencias de toda la cinta. Insertar meme de Scorsese: “Es cine”.

    Asesinos de la Luna recuerda a Pozos de ambición, de Paul Thomas Anderson. En cuanto a la búsqueda del poder mediante el petróleo en Estados Unidos, sin trama racial.

    Como apunte final sobre la cinta destacar que es una película basada en hechos reales y Scorsese actúa como tal. No es una historia lejos de tener un final feliz, es dura y muestra la cara más real de la nación americana. Los personajes tienen sus imperfecciones y actúan bajo su criterio, no el de la trama. Como dijo Moretti, “No hay arcos dramáticos en la vida real” y aquí quien nació gañan morirá gañan y quien nunca supo apreciar lo que tuvo morirá sin saberlo.

    'Quiero entrar en el sorteo de una camiseta de SensaCine'
    Damien Majere
    Damien Majere

    1 críticas Sigue sus publicaciones

    0,5
    Publicada el 12 de noviembre de 2023
    Junto a "Fiesta de salchichas" y "La casa de cera" esta película guarda un lugar especial como el bodrio mas grande (y largo) jamas narrado. Una soberana mierda envuelta en papel de regalo como es el reparto, que pobrecicos míos no tienen ninguna culpa de lo que hace el director. Personalmente no pienso volver a ver otra película de Scorsese JAMAS.
    Andrés C
    Andrés C

    1 críticas Sigue sus publicaciones

    4,5
    Publicada el 9 de noviembre de 2023
    De entrada, no quisiera abundar en cuestiones argumentales ni en cuñas publicitarias sobre la bondad actoral y la factura técnica de esta producción.

    Prefiero dejaros algunas pistas:

    En tiempos de precipitación, incertidumbres y promesas de satisfacción inmediata, se nos invita a un viaje, tan apabullante como medido, que nos traslada como si fuera una fábula y un ejercicio de memoria a un territorio donde la mezquindad y la codicia propician calamidades que se adivinan desde el título de la película.

    No extraña que el cada vez más respetado Martin Scorsese haya reconvertido sus personajes de gángsters en colonos y estemos en un espacio donde la convivencia con los indios tras años de confrontaciones obliga a una reflexión sobre el engaño, la impunidad y la prepotencia.

    No hay rastro de la épica de aquel Oeste de los héroes fordianos, aquí la sabiduría fílmica se focaliza en dibujar las aristas que hacen que la naturaleza humana sea puñetera y la catadura moral de algunos individuos aprovechando la manipulación en beneficio propio y las ansias de riqueza colisionen frente a la dignidad y sentido de la tradición de los verdaderos nativos de esas tierras.

    Aunque he leído que inicialmente se rodaron cinco horas de metraje que afortunadamente se han resumido en casi tres horas y media. Seguramente, ese festín cinéfilo, no apto para todos los públicos, podría servirse y proyectarse con un intermedio y parte de la audiencia lo agradecería.

    Por último y ya que forma parte del título original, la Luna de Flores es la luna llena de mayo que coincide con la época de abundancia y fertilidad de la tierra para los nativos de América del Norte y con esa acotación intuyo se entiende mejor que si se deja en “Los Asesinos de la luna".
    Iván Cerezo Cabeza
    Iván Cerezo Cabeza

    1 usuario 3 críticas Sigue sus publicaciones

    5,0
    Publicada el 9 de noviembre de 2023
    «Quiero entrar en el sorteo de una camiseta de SensaCine»

    En las primeras imágenes de "Killers of the flower moon", tras la erupción de una fuente de oro líquido en las tierras de un poblado indio, le siguen unas imágenes de carácter documental en blanco y negro 1:1´33 que funcionan de testigo acerca de la fiebre por la riqueza que vivía la sociedad estadounidense en la segunda década del siglo XX. Estas imágenes en escala de grises se mezclan con el fundido del Scope a color de la cámara de Scorsese, que selecciona al personaje de Leonardo DiCaprio entre los asistentes de un vagón de ferrocarril sedientos por oportunidades de hacer dinero. A lo largo del filme volverá a existir este enlace entre ambas imágenes que nos muestran unos crímenes cometidos a sangre fría. La imagen documento y la imagen ficción se entrelazan en la nueva cinta de Martin Scorsese guardando una brillante clave, un querer solaparse para comprenderlas como la misma cosa, reduciendo el poco espacio que las separa en cuanto a intención testimonial de unos hechos reales. Es así como la película hace su carta de presentación y pretende ser ante todo una maniobra de recuperación de la memoria histórica por medio de un relato aterrador: la historia real de los crímenes cometidos contra la nación nativa Osage por la posesión de las tierras y la explotación del codiciado combustible.

    El western revisionista y el cine de gangsters se conjugan en este filme con total plenitud y conforman una obra formidable, una cumbre más y desde hoy hito en ambos géneros, que viene a invertir los valores de ese “Print the legend” de John Ford. En la película de Scorsese no hay espacio para la leyenda, ni melancolía o añoranza por los tiempos del Old West. Lo que se nos presenta es una monumental tragedia, y es ahí donde reside —según quien escribe estas palabras— uno de los mayores hallazgos de la cinta ¿cómo hacer que una película enorme, que una historia que desprende un cierto estremecimiento de épica pueda sin embargo ser una película que permanece siempre distante con lo que muestra? ¿Cómo conseguir no hacer del infierno y de la maldad un sitio de regocijo? Scorsese cuenta esta historia con un sentido del tamaño de cada encuadre y con una precisión quirúrgica en los movimientos de cámara y puntos de vista inusitado, todo tejido en una pieza de orfebrería que consigue siempre hacer avanzar a una narración fríamente calculada. Nunca el plano general ha tenido tanta rigurosa dimensión de denuncia, y se debe todo a la más sentida sobriedad de estilo y fría ironía que se desprenden de sus afiladas imágenes, muestra del mejor cine reivindicativo que no subraya sus propósitos sino que confía en su capacidad de hablar a través de la representación —del hecho de mostrar para que el espectador pueda juzgar—. Palabras mayores que hacen enmudecer y desarman por completo. Véase a este respecto la escena de baile entre el personaje interpretado por Leonardo DiCaprio y Lily Gladstone en la que si bien en primera instancia la película muestra el baile y la música como celebración del enlace matrimonial, al mismo tiempo y sutilmente lo que se festeja por debajo y en complicidad es el malvado plan que urde el personaje de Robert De Niro. Esa compleja dinámica punta de flecha de toda la narración del filme guarda su más difícil encuentro en el personaje que interpreta DiCaprio. Protagonista y antagonista al mismo tiempo, mayormente guía de la narración y que opera como piedra angular de ese continuo vaivén de expulsión del relato, parece querer representar a una cierta parte de la sociedad norteamericana que como él se mueve entre ignorancia y el autoengaño de la Historia. Características igual de condenables para Scorsese.

    Todo ello prepara la última parte del filme en la que hay un doble juicio. La gran clave que supone la desmesurada duración de la película tiene su sentido en la resistencia de Scorsese a narrar con el tradicional rito de la elipsis, formula frecuentemente usada para, después de haber enredado al espectador en una serie de hilos dramáticos que se acaban agotan, llegar de forma rápida, optimizada y sorprendente a una resolución satisfactoria. Igual que la propia memoria, esta es una cuestión de tiempo, tiempo medido en cantidad; pues si durante aproximadamente una hora y media hemos asistido a la maquinación y ejecución de los crímenes de William Hale (Robert De Niro) y los suyos, durante otra hora Scorsese nos obliga y nos somete a ver cómo pagan por ellos, escena por escena, pieza a pieza, hasta caer sobre todos el peso de la doble ley —la del propio juicio y la de la cámara-mirada—. Este gesto de justicia histórica y de deuda con las personas/personajes víctimas de los asesinatos, en detrimento de la aparente perfección de la propia película, es uno de los gestos morales más bellos vistos recientemente en el cine y que el propio Martin Scorsese en persona cierra. Es así como "Killers of the flower moon" participa de un cine exigente, exigente porque nos fuerza a plantearnos tradiciones cómodamente asumidas.

    En un año en el que hemos sido convocados por la última película de Steven Spielberg y la nueva de Víctor Erice, filmes que junto con "Los asesinos de la luna" comparten aparentemente lo que podemos considerar de forma reduccionista “defectos", son sin embargo películas que apuestan por hablarnos, por impulsar con cada plano y gesto al cine más lejos aunque para ello haya que sacrificar su aparente perfección formal. Deseosas de hacer que volvamos a aprender a mirar, este gesto rompe con un cine algorítmico, hecho a base de formulas y de esquemas narrativos implantados en laboratorio y perfectamente medidos. Lo de estos cineastas se trata pues de una revolución. Ante un cine que nos interpela, una función crítica necesaria. Siempre, a favor de un cine imperfecto.
    Javier Vázquez
    Javier Vázquez

    21 usuarios 48 críticas Sigue sus publicaciones

    4,5
    Publicada el 7 de noviembre de 2023
    "Los asesinos de la luna" (2023) de Martin Scorsese - Crítica de Javier Vázquez (07/11/2023)

    *AVISO* Se recomienda leer la crítica después de haber visualizado la cinta. Puede contener revelación de detalles de la trama (spoilers).

    El maestro vuelve a la gran pantalla, uniendo a sus dos actores fetiche por primera vez, Leonardo DiCaprio y Robert De Niro. Una pareja que hace una combinación perfecta entre sobrino y tío, en la ficción, y que muestra quién es el moldeador y quién el moldeado.

    Martin Scorsese dirige esta preciosa cinta siendo la más larga de su carrera hasta la fecha, con una duración de 3h 30m que para nada se hacen pesadas. Y es que, una vez más, demuestra quién es él, compitiendo, este gran año de estrenos, con auténticas bestias de la cinematografía como; Cristopher Nolan, Sam Mendes, Wes Anderson, Ari Aster o Ridley Scott entre otros. Pero Martin Scorsese no se achanta ante nadie, pues, aunque lamentablemente haya sido un fracaso en taquilla, por su larga duración seguramente, a la crítica no la ha dejado indiferente y es que estamos ante una de las películas más cuidadas del director de “Toro salvaje”. Se muestra el cuidado en las escenas, la rigurosidad de la historia de los Osage, y que sabemos que Scorsese es muy de ir al grano en cuanto a palizas o escenas con gran dinamismo, no se nota en gran medida en esta película, es decir, aunque estemos acostumbrados a ver asesinatos, tiros, sangre, aquí lo hace de una manera más suave y cuidada, sin quitar que se nota su presencia en la dirección, o que haya escenas crudas.

    La película para mi gusto tiene una introducción muy buena, pues juega, como siempre, con la música más americana que se pueda uno encontrar, esta vez a manos de Robbie Robertson, tristemente fallecido en agosto de este mismo año y en el que se le menciona en créditos como “En memoria de Robbie Robertson”, a parte de su papel principal. La banda sonora hace que muevas la cabeza y los pies en algunas escenas que te transmiten muy buen rollo.

    Hablemos un poco de la interpretación. ¿El mejor papel de DiCaprio actuando? Me tengo que morder la lengua, pero no, ¿o sí? Realmente Leo tiene pocas películas en las que su papel no lo haga bien, o al menos, no sea tan notorio. Pero es que es acojonante como trabaja este hombre. Se nota que la calidad de interpretación está al nivel que exige Martin Scorsese, y eso influye mucho, un director como él no esperaría menos de un actor semejante, sin contar que ya se conocen bastante bien, pero DiCaprio brilla.

    De Niro, otra bestia. Las expresiones que pone cuando se ríe y cuando está serio, ese cambio tan radical, es miel para los labios. Se me escapan carcajadas cuando no debería en algunas escenas dramáticas, pero su cara es un cuadro, y está hecho a propósito. Esa decepción que muestra ante su sobrino Ernest… Realmente fabuloso.

    La he dejado para la última, no por ser la menos importante, sino por que quiero dedicarle mi más sincera admiración ante su interpretación. Hablo de Lily Gladstone (Mollie Burkhart).

    En el principio de la película nos encontramos una mujer con un carácter tajante, que sabe en todo momento lo que quiere y que no se deja manipular por nada ni nadie, y eso en mi criterio es muy difícil de interpretar, y ella lo hace muy fácil. Una vez que se casa con nuestro querido Ernest Burkhart (Leonardo DiCaprio), se muestra una mujer querida y feliz. Después de estar bastante enferma, vemos una mujer “apagada”, con ganas de morir, y eso sí es bastante difícil de logar como actor. Lily Gladstone acepta encarnar al personaje, haciendo una transición por varias etapas, y que consigue mis respetos como actriz, pues ese sufrimiento de perder poco a poco a familiares, y la desesperación de no saber quién o quienes son los culpables… Me parece una actuación asombrosa y que realmente echaba de menos.

    Rodrigo Prieto vuelve a formar parte del equipo técnico de Scorsese como director de fotografía, y nos hace auténticas maravillas como ese fondo que nos dejan los trabajadores en frente del fuego, o las preciosas imágenes a cámara lenta, que no serían nada si estos dos genios, Scorsese y Prieto, no fueran cómplices de hacer que el cine siga siendo cine, dure lo que dure. Gracias a ellos disfrutamos de imágenes que nos dejan boquiabiertos, que hacen que nos olvidemos del mundo y nos sumerjamos en el suyo.

    Lo siento, pero tengo que destacar una parte del filme, y es cuando al principio Ernest Burkhart (Leonardo DiCaprio) baja del vagón de tren y se encuentra un grupo de hombres peleando, y sin venir a cuento, se mete pegando patadas a la multitud y tirando con fuerza una bola de papel. Realmente una introducción muy buena porque no podía estar más contento en cuanto a música y a comedia. La conversación de Ernest con su tío William sobre las mujeres, y cómo busca William la aprobación en el hermano de Ernest, Byron, es brutal.
    Naoguay2
    Naoguay2

    1 críticas Sigue sus publicaciones

    0,5
    Publicada el 5 de noviembre de 2023
    Basura, superlenta, la pelicula no está mal, sin más la verdad, pero 3h y 30min para nada. La mitad de la sala se ha ido a mitad de pelicula.
    ¿Quieres leer más críticas?
    • Las últimas críticas de SensaCine
    • Las mejores películas
    • Las mejores películas según los medios
    Back to Top