En la sierra de Brejeira, en Portugal, la muerte es un tema que está muy presente y que se trata con total naturalidad, como la vida o el sexo. En ese paraíso terrenal los viejos lugareños conviven con la nueva ola de extranjeros, que llegan huyendo de las grandes ciudades. El corcho es la principal forma de subsistencia en un lugar que tiene el mayor índice de suicidio del país. Y todo el mundo está sumido en su propia soledad, ya sea obligada u elegida.
Este documental, dirigido por Bárbara Mateos (Tócala otra vez, Toni), indaga en la forma de vivir de los habitantes de Brejeira y profundiza en las peculiaridades de su carácter.