Este es el primer documental autorizado por la familia de Whitney Houston tras su muerte en 2012.
El cineasta Kevin Macdonald ganó un Oscar gracias a su documental One Day in September, mientras que el productor Simon Chinn ha trabajado en otros dos proyectos ganadores del Oscar a Mejor Documental: Man on Wire y Searching for Sugar Man.
Whitney Houston vendió más de 200 millones de álbumes en todo el mundo, convirtiéndose en una de las artistas más famosas de este siglo y en una de las voces más reconocidas. Además hasta la fecha es la única cantante que ha logrado ser siete veces consecutivas número uno en la lista norteamericana.
Multitud de las entrevistas realizadas no pasaron al corte final, como la de Jennifer Hudson, pues el director sentía que carían de verdadero contenido, pues eran banales y poco interesantes.
Kevin Macdonald ha afirmado que con este documental busca que "la gente salga del cine con un sentimiento positivo sobre Whitney y su música", una artista a quien considera "completamente única por el hecho de ser una estrella del pop negra que vendía bien en países en el que los artistas negros no triunfaban", además de tener "la mejor voz de los últimos 50 años".