Película usa 2022, de una duración de 130 minutos, con una valoración de 4/10, bajo dirección de Roland Emmerich y guión de Spenser Cohen, Roland Emmerich, Harald Kloser, con un presupuesto de 140 millones. Ciencia fricción apocalictica selenita.
Estamos ante una de esas películas que no pueden dejar indiferente a nadie que la vea. Y desde luego no en el buen sentido. Moonfall, el trabajo de Roland Emmerich, el afamado director de ese cine centrado en posibles catástrofes que aniquilen la tierra, es un completo despropósito cinematográfico a gran escala.
La premisa de la que parte te mete de lleno en una trama que, a priori, podría dar juego. La luna se ha desviado de su eje rotacional y va camino de chocarse contra la Tierra
destruyéndola por completo. Como no podría ser de otra manera, el único gobierno mundial que pondrá su maquinaría a disposición de la misión ‘Salvar la Tierra’ es el de Estados Unidos, ayudado por… ¡el gobierno chino! Una decisión poco creíble, pero que se entiende al saber que estamos ante una coproducción USA-China, y ya sabemos que quien paga, manda.
Con un reparto que luce realmente desganado y desmotivado el guion de la cinta es lo que de verdad más aterra. Un sinfín de clichés, momentos absurdos, trucos narrativos muy pobres, decisiones injustificadas y giros incomprensibles
copan más de dos horas de metraje que, eso sí, hacen que esboces alguna que otra sonrisa ante la ridiculez que se muestra en pantalla.
Y es que la película intenta ser graciosa en algunos momentos a través de unos gags tan rancios como repetitivos, pero es realmente divertida cuando busca ponerse dramática y trascendental. Son los momentos más trágicos los que de verdad consiguen hacerte reír aunque, desde luego, no estaban pensados para ello. Y en lo que lo peor sea la trama 'survival' terrestre de los familiares.
A excepción del protagonista John Bradley, quien le da humor y excentricidad a su personaje lleno de falacias y destreza verbal, todo el elenco se obsesiona con un melodrama exagerado, aspecto que no es del todo su culpa, sino del ineficiente guion de Roland Emmerich, Harald Kloser y Spenser Cohen con diálogos clichés y tramas alargadas innecesariamente para cumplir, al parecer, una cuota de duración.
Moonfall no se esfuerza en lo más mínimo para innovar a nivel narrativo
Lo importante no es saber si la Tierra acaba destruida, sino cómo se pudo llegar tan lejos en un proyecto tan mediocre.