Fluir (o no) hacia la maternidad
por Paula Arantzazu RuizEn Tierra firme Carles Marqués –Marcet nos cuenta la historia de una pareja de chicas que vive en un barco y que tiene que hacer frente a los deseos de ser madre de una de ellas. Nada más sencillo y nada más complejo que la cuestión de la maternidad, porque en la encrucijada que supone un embarazo no son pocas las preguntas que salen a la luz: ¿Cómo cambia la vida cuando se tiene un hijo? ¿Seré capaz de ser buena madre o buen padre? ¿Hasta qué punto el instinto maternal es un deseo egoísta? ¿Qué modelo de familia voy a construir?
Todas esas cuestiones aparecen de manera sucinta en el segundo largometraje de Marqués-Marcet, quien después de 10000 km (2014) vuelve a fijarse en los anhelos y ansiedades de la actual generación de treintañeros, con un pie en la edad madura y con el otro resistiéndose a abandonar los años de juventud. Aquí lo hace proponiendo un triángulo no tan amoroso como parece, una pareja de dos chicas y el amigo de una de ambas, en un escenario atípico (un barco amarrado en los canales de Londres), que funciona como metáfora de la inestabilidad y la incertidumbre con la que los personajes se mueven día a día. El trío no es tan perfecto como podría haberlo sido (quizá una propuesta de relación completa a tres bandas hubiera sido más valiente), pero de lo que no cabe duda es de la maravillosa química entre el trío protagonista (Natalia Tena, Oona Chaplin y David Verdaguer). Lo que nace del cruce de miradas, silencios cómplices y acercamientos sutiles entre cada uno de ellos sustituye algunos desequilibrios que se dan en relación a los deseos de los personajes. Ayuda, asimismo, un guion ágil, que comienza dejando espacio a los chascarrillos y al slapstick verbal para después transformarse en un melodrama generacional con más verdad de la que aparenta su superficie.
A favor: El estado de gracia del trío protagonista, y muy especialmente Natalia Tena (en un cambio radical de registro).
En contra: Que los deseos de los protagonistas no tienen el mismo peso ni están equilibrados.