En 1964, el bailarín y coreógrafo belga Maurice Béjart se propuso coreografiar la Novena Sinfonía de Beethoven, uno de los iconos universales de la música. A pesar de que muchos se escandalizaron, el resultado fue de tal belleza que hoy está considerada una de las coreografías clave en la historia de la danza.
Cincuenta años después, Giles Roman decidió retomar aquella aventura y volver a coreografiar la música de Beethoven. La cineasta Arantxa Aguirre (Una rosa para Soler, Un ballet para el siglo XXI) es la encargada de dirigir este documental sobre el proceso de creación de este gran espectáculo.