Jon Watts vuelve a dirigir este filme después de haber dirigido los dos filmes anteriores, Spider-Man: Homecoming (2017) y Spider-Man: Lejos de casa (2019).
El presidente de Marvel Studios, Kevin Feig, produce esta película junto a Amy Pascal.
Esta película es la tercera entrega de la saga formada por las películas Spider-Man: Homecoming (2017) y Spider-Man: Lejos de casa (2019).
En un principio, Disney y Sony no fueron capaces de alcanzar un acuerdo, por lo que la película no iba a formar parte del Universo Cinematográfico de Marvel. Pero gracias a la intervención del propio Tom Holland, se abandonó la idea de cancelar el proyecto y se llegó a un acuerdo para que fuese parte del MCU.