En buenas manos y con amorosos sentimentos, además. Jeanne Herry presenta, con elegancia y calidez, actuaciones muy mesuradas y creíbles, aunque adoptando, en ocasiones, tonalidades de documental. El bebecito, para comérselo. Sin embargo, no nos engañemos; en mi parecer se trata de propaganda del país vecino sobre la bonhomía de su sistema social. Es TIERNA, sí; pero también algo EMPALAGOSA. .2 sobre 5. ..PICARD..