El director de las dos entregas de Guardianes de la Galaxia, James Gunn, produce esta película.
La película la escriben Brian y Mark Gunn, hermano y primo respectivamente de James Gunn.
La película es una versión en clave de terror del clásico planteamiento de superhéroe llegado del espacio exterior a la Tierra, criado por una pareja de humanos. Es decir, un Superman que en lugar de usar sus poderes para el bien, los emplea para hacer el mal.
Este es el segundo largometraje de David Yarovesky después de The Hive (2014). Yarovesky había dirigido además el popular cortometraje Guardianes de la Galaxia: Inferno (2017) protagonizado por David Hasselhoff.
El director David Yarovesky interpretaba a Goth Ravager en Guardianes de la galaxia (2014).
El actor que da vida al niño protagonista, Jackson A. Dunn, interpretaba la versión joven de Ant-Man en Vengadores: Endgame (2019).
Las escenas de la escuela secundaria se rodaron en la ya desaparecida Patrick Henry High School en Stockbridge, Georgia. Esta misma escuela se utilizó en las temporadas 1 y 2 de la serie Stranger Things.
Este el primer largometraje de terror en el que James Gunn participa como productor.
Elizabeth Banks y David Denham ya habían trabajado juntos en Power Rangers (2017).
Para la versión de la película en Reino Unido se eliminaron dos escenas para reducir las imágenes sangrientas y obtener una calificación de a partir de 15 años.