La película obtuvo el León de plata en el Festival de Venecia de 2019.
Además del León de plata por este filme, el cineasta sueco Roy Andersson fue también galardonado en el Festival de Venecia por su película Una paloma se posó en una rama a reflexionar sobre la existencia (2014). En Cannes el director obtuvo el Premio del Jurado por Canciones del segundo piso (2000) y su película Una historia sueca de amor (1970) fue galardonada en el Festival de Berlín.