Parsimoniosa película independiente que cautiva desde el
principio hasta el final. Y es, precisamente, esa pasividad
rítmica (ahí dejo el oxímoron), lo que hace que el
espectador se interese en todo momento por lo que sucede
en pantalla, bien dispuesto todo por Miranda July. Es,
además, una latente y soterrada historia
de lesbianismo, cuyo productor ejecutivo es el mismísimo
Brad Pitt. Celuloide que solo podría ser emitido en tv, supuestamente,
en 'el cine de la 2', para que os hagáis una idea. Un film DE GÉNERO.
.3 sobre 5. ..PICARD..