Para el historiador y crítico Mark Cousins era importante con esta película huir de estereotipos de género, por ser muy peligrosos para los artistas y los cineastas en general. Según sus palabras: "Mucha gente dice que las mujeres son expertas en hacer películas sobre niños, vida doméstica y relaciones, y después de décadas viendo cine de mujeres creo que esto es una absoluta tontería. Las mujeres han hecho cine de todo tipo, desde la acción de Kathryn Bigelow hasta las grandes epopeyas bélicas de las cineastas de la Unión Soviética".
La película ha participado en el Festival de Venecia, además de en los Festivales de Toronto y Sevilla.
Mark Cousins se ha convertido en uno de los críticos más importantes del panorama actual por su serie documental The Story of Film: An Odyssey (2011), una serie de 15 horas que revisa de forma muy personal y más allá del centralismo hollywoodiense la historia del cine. Esta serie es una de las más vistas en la plataforma Filmin.
Según ha explicado Mark Cousins, en relación a la poca visibilidad de todas las mujeres directoras de las que habla en su filme: "Se puede ser sexista por omisión. No intento denunciar a mis colegas y acusarles de injustos o de haber obviado a propósito a las cineastas. No creo que haya habido una especie de sexismo racional y premeditado, pero sí que creo que muchos hombres se identifican solamente con otros hombres y por eso mismo dejan de lado a las mujeres. Y eso, consciente o inconscientemente, es sexismo."
La película tiene una duración de 14 horas, ya que está concebida como una serie. Además, el filme no plantea una historia del cine de mujeres desde el punto de vista cronológico, ya que lo hace desde distintos ejes temáticos.
Mark Cousins fue premiado con una Mención especial en el Festival de Cannes por su película La mirada de Orson Welles (2018).