Esta es la primera película en la que participa el aclamado director de cortos, Pawel Maslona.
Los actores Bartlomeiej Kotschedoff y Aleksandra Pisula (que interpretan a un par de hermanos en la película) ayudan a Maslona con el guión del largometraje.
En un primer borrador, la historia estaba ambientada en Italia, concretamente en Nápoles. Sin embargo, conseguir fondos no fue algo sencillo para el director y los guionistas, que consiguieron que el PFI les financiara, con la condición de que cambiaran la localización de la Historia a Polonia.
La película consiguió rodarse en, tan solo, 23 días.