Las sesiones de este concierto que duró dos días fueron filmadas por un equipo de rodaje liderado por el director Sydney Pollack. Desgraciadamente, el material rodado terminó en una bóveda y durante cuatro décadas ha sido uno de los tesoros cinematográficos perdidos de la música del siglo XX.
El concierto de góspel de Aretha Franklin tuvo lugar durante dos días en la Iglesia Baptista New Bethel Church de Los Ángeles, los días 13 y 14 de enero de 1972. El concierto fue filmado con un equipo de ingenieros de cine y sonido y cinco cámaras de 16 mm, todas dirigidas por Sydney Pollack.
Antes de la muerte de Pollack en 2008, el director expresó su deseo de que se completara la película, y el productor y compositor Alan Elliott lo abordó con un equipo de gente apasionada con el proyecto.
El álbum Amazing Grace fue todo un éxito, y vendió más de dos millones de copias solo en los Estados Unidos. Con él Aretha Franklin obtuvo en 1973 el Premio Grammy. El disco fue el más vendido de la carrera discográfica de más de cincuenta años de Franklin, además del álbum de música gospel en vivo más vendido de todos los tiempos.
A este concierto también asistió Clara Ward, cantante de gospel estadounidense que marcó una reevolución dentro de las formaciones gospel, consiguiendo el primer hit gospel que lograra vender más de un millón de copias, titulado Surely, God Is Able. Clara Ward sin duda fue una gran influencia musical para Aretha Franklin, además de su mentora.
En el documental se puede ver a los miembros de The Rolling Stones Mick Jagger y Charlie Watts, que asistieron a este concierto en la Iglesia Baptista New Temple Missionary. Curiosamente, estaban a punto de grabar Exile on Main Street, el álbum más influido por el gospel de esta mítica banda de rock.
Este es el primer filme que dirige el compositor y productor Alan Elliott.
En 2019, la película ha participado en festivales como el de San Sebastián o el Miami Film Festival.