Pauline Kael, crítica de cine de The New Yorker desde hace muchos años, ha luchado toda su carrera por dejar huella. Su personalidad está llena de chispa, con una inquebrantable confianza en sí misma, un pasado complejo y, sobre todo, un profundo amor por el arte y el cine. Este documental indaga en su figura y en su obra periodística.