Según explica el director Salvador Calvo, la idea de este filme surgió en el rodaje de 1898: Los últimos de Filipinas, al contactar con CEAR (Comisión Española de Ayuda al Refugiado), en sus propias palabras: "conocí a dos niños que sirvieron para inspirar a dos de los protagonistas de nuestra película. Existen 258 millones de emigrantes en el mundo. Unos 6.100 mueren cada año intentando alcanzar un mundo mejor. Con esta película pretendo acercar al público alguna de estas historias para poner cara, carne y nombre a este drama”.
El filme supone el debut de los jóvenes actores Moustapha Oumarou y Zayiddiya Disssou, elegidos tras meses de casting en varios países del continente africano y que se han convertido en uno de los grandes descubrimientos del rodaje.
El director del filme, Salvador Calvo dirigió 1898: Los últimos de Filipinas (2016), película que también protagonizaban Luis Tosar y Álvaro Cervantes.
La película está protagonizada por Luis Tosar, Anna Castillo, Álvaro Cervantes, Nora Navas, Jesús Carroza, Ana Wagener y Miquel Fernández.
La película se ha rodado en diferentes escenarios naturales de África, desde la selva hasta el desierto, con espectaculares paisajes de la República de Benín, país que ha acogido por primera vez en su historia el rodaje de un largometraje internacional. El filme también se ha rodado en Madrid y Murcia.
El reparto del filme cuenta con los ganadores del Goya Anna Castillo, Luis Tosar, Ana Wagener y Nora Navas, además del nominado al Goya Álvaro Cervantes.
Según explica la actriz Ana Wagner la película es "una Babel a la española". La comparación resulta curiosa, ya que Wagner trabajó con el director Alejandro González Iñárritu en Biutiful (2010).
Tal como explica Javier Ugarte, uno de los productores del filme, esta es su "tercera producción en la Africa subsahariana. Después de rodar en Uganda El cuaderno de Sara y El viaje de Marta (Staff Only) en Senegal, el reto era encontrar otro país africano que nos permitiera recorrer de Camerún a Marruecos, pasando por Senegal y Mauritania, sin salir de un mismo territorio. Fue la república de Bénin la que reunía las condiciones y paisajes que requeríamos para un rodaje tan ambicioso y exigente."
El título de la película, Adú, es similar al del pequeño Adou, el niño que entró en Ceuta en el interior de una maleta y cuya historia dio la vuelta al mundo.
Inicialmente la película iba a llamarse Un mundo prohibido.