Crítica de SensaCine.com para Una joven prometedora: Una 'rape-revenge' impregnada de cine negro

Una joven prometedora es la película que representa al movimiento #metoo, de una forma bastante diferente a como habíamos visto hasta ahora, por ejemplo, en la muy pobre Bombshell (2019) o en la mucho más interesante The Assistant (2019).

Este es el primer largometraje dirigido por la también actriz Emerald Fennell -ella es Camilla Parker Bowles en The Crown-, también autora del guión, que le ha hecho alzarse con el Premio Oscar a Mejor guion adaptado, no duda en bañarse en el cine de género -suspense, terror, comedia negra- para facilitar la digestión de, en el fondo, un relato ciertamente terrible.

Con cinco nominaciones a los Oscar, entre ellas a Mejor película, Una joven prometedora, creada por Emerald Fennell (autora del guion de seis episodios de la temporada 2 de Killing Eve), encaja en la perfección en unos Oscar que han querido buscar la rima comprometida con los problemáticos tiempos que vivimos: la depresión económica, las manifestaciones del 'Black Lives Matter' o el uso de los poderes fácticos para condenar los movimientos sociales, y no podía faltar una película que reivindicara el movimiento 'Me Too'.

MUY AL ESTILO INDIE

Carey Mulligan (El gran Gatsby) da vida a una mujer en una cruzada: vengar la muerte de su mejor amiga, violada y humillada en la universidad y, para ello, finge estar etílica en bares y clubs a modo de cebo para los miserables depredadores que no dudan en aprovecharse de dicha circunstancia… para luego revelar sus verdaderas intenciones (que no desvelaré aquí).

Se trata casi de un 'rape & revenge', eso sí, alejado de los terrenos del cine de explotación y adecuándose a una puesta en escena muy indie, de las que encantan en el Festival de Cine de Sundance.