Crítica de SensaCine.com para Casi famosos: Nostálgicos setenta

Cuatro años después del éxito de Jerry Maguire, Cameron Crowe se adentró en sus propios recuerdos, cuando era un joven periodista musical de la revista Rolling Stone, para rodar Casi famosos, crónica de un grupo de rock en plena década de los setenta en la Norteamérica post hippie al que sigue ese joven que pasa de fanático seguidor a esmerado periodista que acompaña al grupo de gira. De este modo, Crowe reconstruye la época y el espíritu de la misma a la par que nos narra la historia de un joven que descubre el sexo, las drogas y, sobre todo, que no todo lo que reluce es oro. No es, no obstante, una mirada desmitificadora la que lanza Crowe, aunque sí hay atisbos de querer ser lo más realista posible al respecto. La vida de los músicos durante la gira evidencia que algunos mitos sobre el Rock ‘n' Roll bien pueden ser ciertos, aunque tampoco parece importarle demasiado al cineasta, más atento a la evolución de un joven perdido en un mundo en apariencia adulto y que, sin embargo, no lo es tanto. En esto, Casi famosos resulta casi ejemplar: entendemos las motivaciones del joven, sus emociones, sus sentimientos, acompañamos sus descubrimientos. También lo es en el retrato de la época, en el trabajo entre imagen y música, y todos los actores secundarios, que están magníficos; pero aun así, Casi famosos no llega a ser nada redonda. Los motivos, resultan esquivos. Quizá porque Crowe, al final, siempre se queda en la superficie de las cosas y bajo la apariencia de profundidad no hay más que una mirada bien elaborada pero poco más. En definitiva, una película notable.

A favor: Los actores y la música.

En contra: Determinados momentos demasiado "cursis".