Crítica de SensaCine.com para La leyenda de Bagger Vance: Las leyendas del golf

Las películas de Robert Redford siempre son un valor seguro, para lo bueno y para lo malo. Siempre son films académicos, realizados con los medios adecuados, bien actuados. Películas aseadas, podríamos decir. Pero también, en ese despliegue de profesionalidad y buen hacer, uno hecha de menos más riesgo, más atrevimiento o, sobre todo, más personalidad, que se sepa quién está detras de la cámara.

'La leyenda de Bagger Vance' es la enésima película bella y nostálgica que narra una amistad masculina en un momento del pasado, que el director nos dice que fue mejor que este. Estamos en la Gran Depresión y hay un torneo de golf. Un golfista prometedor pero perdedor de vocación se encuentra con un ayudante misterioso que consigue hacerle creer en su juego, pero también en sus opciones vitales.

Es una película alimenticia, siempre con sentimientos positivos, lo que puede resultar extraño si tenemos en cuenta que su director hizo películas tan turbias y geniales como 'Los tres días del cóndor' o 'Todos los hombres del presidente', y que dirige el Festival de Sundance, que trata de mostrar una conciencia crítica dentro del cine americano, siempre más pendiente del espectáculo. Aún así, 'La leyenda de Bagger Vance' es una buena película, con el añadido que siempre tienen los films deportivos: ver a personas compitiendo con dignidad y compañerismo por alzarse como vencedores de un torneo.

A favor: Las escenas del torneo de golf.

En contra Demasiado académica.