Últimas opiniones sobre Ámsterdam

Película divertida. Con personajes histriónicos y que funcionan. Un storytelling de fórmula clásica: relato conspiranoide ambientado en un periodo de la historia que todos conocemos y con típico plot twist final. Fácil de seguir y entretenida, con toques de humor por ese surrealismo que envuelve todo. Gran casting de actores. Bale, dando vida al doctor, le otorga una rareza creíble. Una película para disfrutar y pasar un buen rato. Tampoco pretende más y a veces se agradece. Yo la recomiendo.

AMSTERDAM
Película usa del 2022, de una duración de 134 minutos, con una valoración de 6/10, con dirección y guión de David O. Rausell, con un presupuesto de 80 millones. Thriller comedia, epopeyico romantico.

Super produccion ambiciosa con trasfondo historico conocido como "Business Plot": un supuesto complot que ocurrió entre 1932 y 1933 para sacar al presidente Franklin D. Roosevelt del poder y así establecer una dictadura en Estados Unidos, con destacados actores que termina siendo, si es ello posible a la vez, brillante y decepcionante, arrolladora y sin sentido, encantadora y odiosa.
Variopinto género que no termina de asentarse.
Desde luego, si todas estas contradicciones son lícitas en darse en una misma definición. tendría que ser en la filmatografia de David O. Russell, quien ya habia dado muestra en su estilo de combinar ideas y secuencias magistrales, con detalles excesivos y fallidos en sus trabajos.

Este largometraje probablemente sea deslabazado, pero también resulta bastante entretenida en gran parte de su metraje para el gran público, ante todo por la singularidad extravagante de sus protagonistas, y todos veteranos de la Primera Guerra Mundial: el médico «experimental» con un ojo de cristal con tendencia a caerse al que se entrega en cuerpo y alma Christian Bale.
Esa enfermera falsamente francesa capaz de hacer arte con restos médicos, con la que Margot Robbie brilla aún más.
El brabucon, enamorado, y luego abogado sin nada especial, salvo ser negro en el momento no adecuado con John David Washington.
Su pacto a tres bandas de cuidarse en tiempos agresivos, su felicidad en la capital holandesa y sus problemas al regresar a Estados Unidos son el hilo argumental de una propuesta que todo el tiempo parece quedarse unos peldaños por debajo de lo que pretende.
El guión es una combinación de buenas intenciones y la vieja fórmula de una gran historia de Hollywood basada en la esperanza. Pero, ya sea por lo manido del argumento o por lo confuso de su narrativa, fracasa estrepitosamente.

Su director rinde tributo al Hollywood dorado, y tiene un despliegue de escenografía con cuidado detalle histórico, grandes diálogos emocionantes y actuaciones sólidas.
El buen ritmo de su trama entre los actores brilla y, las secuencias se convierten en una mirada a un mundo idílico y encantador, que recuerda tiempos más amables y emocionales. 
No obstante, ya sea por que Russell es incapaz de sostener una historia basada puramente en la esperanza o por su desordenado guion, la película falla. Lo hace al caer en una serie de lugares comunes, tan confusos como carentes de sentido, forma y profundidad. Mucho más, cuando analiza su historia desde la concepción del bien absoluto en enfrentamiento con un enemigo difuso y poco claro. 

El resultado es un relato sin mucho sentido o forma que, en buena parte, decae como conjunto de planteamientos. La película va de un punto a otro, sin lograr una linea con profundidad ante el sentido de su argumento.
Una hiperbolica trama que no se decide por ningún punto y termina por decaer hasta convertirse en una mezcla de escenas inconexas cada vez más torpes y caóticas. no justificando el el presupuesto que tiene.

Artesanía cinematográfica pura. Un capítulo conspirativo de lo que hubiera podido ser una Norteamérica perniciosamente nazi, fotografiado de manera excelente y filmado en lustroso color sepia para dar mayor énfasis de realidad de los años 30.

Tres protagonistas practicando sensibilidad, bondad y amistad de por vida entre ellos en ¨Amsterdam¨ y llevándoselas consigo a los EE. UU. de la época. El filme incluye la aparición de Margot Robbie, -de indescriptible belleza facial-, la del prodigioso, en su papel, Christian Bale y la del hijo de Denzel Washington, John David, con la presencia de Robert de Niro como ilustre secundario. Un bravo para Owen Russell (¨Joy¨, 2015). A mi juicio, es SÉPTIMO ARTE. .3️⃣/5. ..PICARD..

Amsterdam (2022).

"A la gente que conoces en momentos de estrés extremo las haces amistades de por vida.”
Un trío de buenos amigos encarnados por el camaleón de Hollywood Christian Bale, la bellísima Margot Robbie y John David, el hijo del incombustible Denzel Washington, son los personajes protagonistas de la última comedia fallida del director y guionista David O. Russell, responsable de cintas como “The Fighter” o “La Gran Estafa Americana” (ambas con Bale como protagonista).

Russell reúne a un importante grupo coral de primeros espadas como si del mismísimo Robert Altman se tratara, aunque con desigual resultado. A saber: junto a las estrellas ya citadas aparece el posiblemente mejor actor de cine de todos los tiempos, Robert De Niro como un reputado general; entre los secundarios también destacan Michael Shannon, Zoe Saldaña, Rami Malek en el papel del hermano del alter ego de Margot Robbie, la cotizada Anya Taylor-Joy, el objeto de la ira de Will Smith, Chris Rock, y los actores Mike Myers y Timothy Olyphant caracterizados de forma magistral.

Aun tratándose de una obra coral con magníficas interpretaciones, con una a priori curiosa historia semirreal sobre los juegos del poder político, con una interesante aunque no sobresaliente banda sonora, una estupenda ambientación retrotrayéndonos a la década de los años 30 (con varias escenas retrospectivas) y con un excelente vestuario, la película de nada menos que dos horas y cuarto de metraje no logra convencer ni al público ni a la crítica especializada (por una vez estoy de acuerdo con el disparatado Carlos Boyero)... ni mucho menos a mí.

Raúl Cabral.
Puntuación personal: 6