"Rocky" es un brillante drama de Boxeo, dirigido por John G. Avildsen y protagonizado por Sylvester Stallone. Es sin duda, la mejor película del género de la historia, por todo lo que significa el personaje de Rocky Balboa, todo un icono en la historia del cine. Philadelphia 1975, un barrio con pocas posibilidades económicas. Ese es el contexto en el que vive un postrero boxeador que a pesar de todas las adversidades que se le presentan en la vida, combina su propia supervivencia con la idea de lograr el éxito en aquello que realmente le gusta. Una bellísima historia de superación y coraje, demostrando desde la humildad que para conseguir tus propositos debes enfrentarte a los obstáculos por muy difíciles que sean de superar. Un entramado reparto de distintos personajes forman parte de la vida social de un boxeador de baja categoría que vive en un barrio bajo de mala muerte. Allí conoce al amor de su vida. Una chica tímida que tiene por hermano a un alcohólico pero entrañable y gruñón Paulie.
El guión de Stallone era en un principio una subversión del sueño americano, pero acabó convertido en un reflejo de éste. Rocky es una mezcla entre los púgiles reales Chuck Wepner y Joe Frazier, es el típico don nadie al que se le da una oportunidad y se agarra a ella como un clavo ardiendo. Eso caló hondo en el público de todo el mundo. Esta cinta es todo un clásico inmortal, donde el Boxeo es practicamente lo de menos. Es un producto serio, crudo, dramático. Te cautiva por la humanidad y sencillez de sus personajes, por la emotividad de su historia con la que es muy fácil sentirse identificado, por esa preciosa historia de amor entre esos dos seres tímidos, por su montaje, por ese pionero rodaje con steadycam, por la fuerza de su súper banda sonora durante toda la película, y la bellísima música de los créditos finales, insuperable. Sin embargo, personalmente lo que siempre me impactó, fué la relación que tenía con su entrañable entrenador, impresionantes momentos que quedarán para la posterioridad, como el encuentro de Rocky y Mickey, cuando este decide entrenarle sólo por que le dieron la oportunidad de enfrentarse al campeón, cuando antes de eso para él era un don nadie.
Y como no, inolvidable el momento "Gonna fly Now", cuando Rocky alza sus brazos al cielo clamando su triunfo, eso es cine. Ese momento que capta con toda sus fuerzas las ganas de un ser humano de despojarse de esa pobreza, esa opresión, esa infelicidad, esa sensación de angústia por haber sido considerado un miserable perdedor. Es en ese preciso instante, cuando uno ha sufrido mucho en la vida, cuando esa brizna de esperanza palpita en el corazón de Rocky como nunca lo hubiera hecho si su vida hubiera sido más fácil, y su cuerpo salta de alegría porque en su vida ha ocurrido algo grandiosamente bonito. Es un filme insuperable, de culto, que marcó una época y que marcará inevitablemente las generaciones venideras, pero no solo eso, invitó al mundo entero a soñar, a superarse uno mismo y alcanzar lo inalcanzable. Además se ha convertido en referente temporal de la industria del cine, a la vez de ejemplo de hacer buen cine, y es que para que una película perdure, no solo basta con dinero, ni pequeños brotes de originalidad o entrega, hay que hacerla perfecta, desde actuaciones, dirección, guión, escenarios, fotografía, montaje, música... Es decir, todo tiene que ser perfecto y poner el alma, porque cuando uno pone el alma, el trabajo tiene su recompensa.
Las actuaciones son magníficas, aquí es donde Sylvester Stallone demostró y para quién todavía siga criticando le de inexpresivo y tópico encasillado en el cine de acción, que no sólo valía para enseñar músculos y disparos. Aquí demostró un talento innegable, por el cual fue nominado al Oscar y merecidamente. Carl Weathers como Apollo Creed se muestra sublime en su papel, de hecho algunos hoy pensamos que ese hombre tenía que ser boxeador, menudo papel se marcó por momentos parecía que hacía de sí mismo. Mención especial también para Talia Shire que encarnó a Adriana, la novia de Rocky. Burt Young como Paulie Pennino en el papel del hermano de esta. Y como no Burgess Meredith que interpretó a Mickey en el papel de entrenador. Todos a un nivel magnífico aunque como ya digo el primero que sorprende es el propio Stallone, marcando el que posiblemente es y será junto a "Rambo" su mejor papel jamás realizado.
En definitiva, considero esta cinta tan emocional y tan aplicable a la vida, que casi me arriesgaría a decir que es como uno de esos cuentos que nos leen desde pequeños, para inculcarnos buenos hábitos y conductas como lo son el esfuerzo, la superación y el ímpetu, para así prepararnos en la vida tanto para los bueno como para lo malo. Gracias Stallone por escribir este guión y por protagonizar esta película, que entre otras cosas me hizo amar el deporte y ver el lado bueno de ello. La importancia de este film, no la representan todos los premios y nominaciones que recibió. Sino el hecho de que es una de esas películas, que logró trascender más allá de la gran pantalla para convertirse no ya en una “religión” sino en una fuente de inspiración y modo de vida para todos aquellos que alguna vez, hemos soñado en nuestro corazón con alcanzar un sueño.