Después de esta primera película, se realizaron numerosas adaptaciones de historietas de Corto Maltés a dibujos animados, que fueron distribuidas casi exclusivamente en Europa.
Pascal Morelli habla sobre Corto Maltés: "Al igual que muchos niños de mi generación, a los 12 años descubrí Corto Maltés de Hugo Pratt en la revista Pif Gadget. En un principio no me gustaba, pero tampoco había intentado leerlo. (…) Pratt me abrió la puerta al confuso, a veces ilógico y contradictorio, pero fascinante mundo de los adultos".
En 1997, Pascal Morelli comienza a adaptar Corto Maltés. Primero trabajó en el proyecto de una serie de televisión y un telefilm para la RAI. En 1998, se trasladó a París, donde buscó más recursos. En cinco años, 400 personas trabajaron en el proyecto, consiguiendo como resultado final unos 500.000 dibujos y 1.000 planos.