Seriamente hablando, Resident Evil no comenzó como una promesa a fin de convertirse en una laureada franquicia. Sin ir más lejos, es al día de hoy que aún hay fanáticos por doquier que dedican su tiempo a insultar a esta saga, y no en vano sea dicho que las razones sobran desde cuanto ángulo vayamos a analizar. El Huésped Maldito, en cuestión, no se salva de esta situación, pero siendo justo y creo que certero, el inicio de esta reconocida franquicia tuvo un paso bastante acertado, así nos pesen ciertas falencias y ausencias que, tras tantos años en su haber, aún lamentamos.
El Huésped Maldito no es ni de cerca una película que pueda honrar a una saga tan aclamada e icónica como lo es Resident Evil hablando en parámetros videojueguiles. Ni más ni menos, esta sucesión videojugabilística tiene un puñado exorbitante de seguidores por todo el mundo, y no es para menos cuando entendemos que su popularidad se la ha ganado a través de títulos que, en su entonces, marcaron un antes y un después en los survival horror. Esta película, en consecuencia, pareciera ser más bien un cortometraje en honor a una obra de magnitudes muy considerables en su posición artística, pero no por ello entendamos que es un desperdicio, ni mucho menos una película que quede en el olvido. Ser primero en algo siempre trae consigo un factor nostalgia en el público, por lo tanto, El Huésped Maldito, si bien no tuvo la misma acogida que el primer videojuego de Resident Evil, sí es recordada como una cinta que dio origen y punto de partida a esta ya formada franquicia cinematográfica.
El Huésped Maldito no es una mala adaptación, aunque tampoco es memorable. Tiene respeto hacia su espejo de contrapartida y se apropia de la esencia que caracteriza al videojuego, y pese a no ser tan contundente en este sentido, al menos es notable que el intento se encuentre en juego. Tómese quizá como una alternativa ajena a su producto original, aunque una de las pocas (o hasta probablemente la única) considerando que la saga, luego, tomó rumbos muy descarrilados. Pero esa ya es otra historia. El Huésped Maldito, en conclusión, se deja apreciar bastante y tiene con qué apropiarse del sello de Resident Evil.