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Sorprende que un director con un universo tan peculiar (se puede estar de acuerdo o no con sus resultados pero nunca te deja indiferente) haya rodado esta película tan anodina, tan simple y tan previsible, con una calidad que no tiene nada que envidiar a un estrenos t.v. de las soporíferas cadenas españolas en abierto. Tiene un tratamiento teatral que me aburre tremendamente, situaciones trilladas y totalmente previsibles en este dramón con ínfulas lacrimógenas que no me conmueve lo más mínimo. Se ha destacado hasta la saciedad la interpretación de su protagonista, Brendan Fraser, pero a mí no me parece ni mucho menos de Óscar aunque conociendo los gustos melodramáticos de la Academia el premio puede caer de su lado. Mala, muy mala, lo peor que he visto en este 2023.
Brendan Fraser protagoniza una actuación maravillosa en todos sus sentidos. No obstante su personaje genera muchos estados, ansiedad, impotencia, rabia, desasosiego, angustia y hasta mala leche.
Es una buena película pero solo por su interpretación, resaltando sus ojos y mirada, sin duda lo mejor, con ellos nos dice todo.
Es una buena película pero solo por su interpretación, resaltando sus ojos y mirada, sin duda lo mejor, con ellos nos dice todo.
La Ballena (2022).
"Mírame… ¿quién iba a querer que formara parte de su vida?”
El ecléctico Darren Aronofsky estrena su nuevo drama protagonizado por Brendan Fraser en el papel de su vida.
Fraser es un hombre homosexual que padece obesidad mórbida severa y vive solo en su desordenado apartamento años después de abandonar a su familia, dando clases en línea de literatura, lo que le mantiene alejado de sus alumnos y de miradas curiosas.
La historia, que se desarrolla íntegramente en el domicilio del protagonista como ocurría en la reciente “El Padre” (2020), recae casi por completo en los hombros del actor de “La Momia” (1999), quien encarna a su atormentado personaje de manera magistral. Aunque, los pocos secundarios que le rodean durante las dos horas que dura el largometraje no se quedan atrás.
En el rol de su hija vemos a la joven actriz Sadie Sink (serie “Stranger Things”); en el de su esposa tenemos a la británica Samantha Morton, a quien odiamos durante varias temporadas de “The Walking Dead” mientras dirigía a los “susurradores”; pero es la tailandesa Hong Chau (series “Watchmen” y “Big Little Lies”) la que quizá dé la campanada en la próxima gala de las estatuillas doradas...
“Moby Dick es solo un pobre animal grande."
Como apuntaba más arriba, el creador de obras como “Cisne Negro” (2010) o “Madre!” (2017) dirige sensacionalmente a nuestro protagonista, quien caracterizado a base de prótesis, interpreta a un hombre de 270 kg que más que a una ballena con la que él mismo se identifica, se asemeja a un cerdo de concurso, haciéndonos huir de cualquier ápice de empatía que podamos sentir por su desgracia autoinfligida.
Raúl Cabral.
Puntuación personal: 7
"Mírame… ¿quién iba a querer que formara parte de su vida?”
El ecléctico Darren Aronofsky estrena su nuevo drama protagonizado por Brendan Fraser en el papel de su vida.
Fraser es un hombre homosexual que padece obesidad mórbida severa y vive solo en su desordenado apartamento años después de abandonar a su familia, dando clases en línea de literatura, lo que le mantiene alejado de sus alumnos y de miradas curiosas.
La historia, que se desarrolla íntegramente en el domicilio del protagonista como ocurría en la reciente “El Padre” (2020), recae casi por completo en los hombros del actor de “La Momia” (1999), quien encarna a su atormentado personaje de manera magistral. Aunque, los pocos secundarios que le rodean durante las dos horas que dura el largometraje no se quedan atrás.
En el rol de su hija vemos a la joven actriz Sadie Sink (serie “Stranger Things”); en el de su esposa tenemos a la británica Samantha Morton, a quien odiamos durante varias temporadas de “The Walking Dead” mientras dirigía a los “susurradores”; pero es la tailandesa Hong Chau (series “Watchmen” y “Big Little Lies”) la que quizá dé la campanada en la próxima gala de las estatuillas doradas...
“Moby Dick es solo un pobre animal grande."
Como apuntaba más arriba, el creador de obras como “Cisne Negro” (2010) o “Madre!” (2017) dirige sensacionalmente a nuestro protagonista, quien caracterizado a base de prótesis, interpreta a un hombre de 270 kg que más que a una ballena con la que él mismo se identifica, se asemeja a un cerdo de concurso, haciéndonos huir de cualquier ápice de empatía que podamos sentir por su desgracia autoinfligida.
Raúl Cabral.
Puntuación personal: 7
No es cuestión de Kilos
Adaptación melodramática de una obra de teatro y se nota en el tono de unas conversaciones directas y cargantes como punzadas de veneno, en un único y asfixiante escenario teatral.
Adicciones, homosexualidad, religión, ... Temas todos diseminados en la historia, pero no lo fundamental de la misma. Lo que realmente hace especial este film es su protagonista, Brendan Fraser, con un personaje tan claro/oscuro como la vida misma. Nada es completamente blanco o completamente negro. Un viaje de miedo, arrepentimiento y dolor. Una catarsis que ha supuesto esta cinta para un actor injustamente denostado.
Una clase magistral de actuación e interacción que deja una impresión bastante profunda y duradera.
Adaptación melodramática de una obra de teatro y se nota en el tono de unas conversaciones directas y cargantes como punzadas de veneno, en un único y asfixiante escenario teatral.
Adicciones, homosexualidad, religión, ... Temas todos diseminados en la historia, pero no lo fundamental de la misma. Lo que realmente hace especial este film es su protagonista, Brendan Fraser, con un personaje tan claro/oscuro como la vida misma. Nada es completamente blanco o completamente negro. Un viaje de miedo, arrepentimiento y dolor. Una catarsis que ha supuesto esta cinta para un actor injustamente denostado.
Una clase magistral de actuación e interacción que deja una impresión bastante profunda y duradera.
The Whale
Película usa del 2022.de una duración de 117 minutos, con una valoración de 7/10, bajo dirección de Darren Aronofsky y guión Samuel D. Hunter, con un presupuesto de 3 millones de dólares.
El enfoque está claro desde el principio. Un profesor de literatura que lucha contra su propio ser, y su físico, buscando su liberación ante su desaparicion. Una persona hundida en la depresión y sus consecuencias, como la obesidad mórbida que vive, consume a Charlie.
El grandisimo nivel actoral y de interpretación de Brendan Fraser hace que nos quitemos el sombrero ante él y la espartana puesta de escena. Transmite mucha lástima y agobio a partes iguales, su ansiedad por la comida cala en los que estamos al otro lado de la pantalla. Ansia como engulle. Ansia que no mastica. Ansia que casi se ahoga. Ansia por su autodestrucción. Ansia su soledad. Ansia su tristeza y ansia la pena que te invade, en su deseo de auto de auto destrucción.
A partir de eso es cuando vamos a ir conociendo la vida de Charlie. Poco a poco, de la mano de los actores secundarios que se van a ir sucediendo a lo largo de la película, se va desarrollando la narrativa, aunque nunca salgamos de la casa del protagonista. Todo lo que la forma aunque no podamos verlo. Es una puesta de escena teatral. Samuel D. Hunter inspiró al director Darren Aronofsky.
En diferentes momentos de la histórica en el que fuera de campo cobra más importancia que lo que vemos. De esta manera su peculiar trama actoral, nos cuentan cómo él abandona a su mujer y a su hija por un alumno al que da clases. Es así, como nos enteramos que pertenecía a una secta de la que intenta salir, cómo se adentra en una depresión que le provoca un trastorno alimenticio y se queda en los huesos y finalmente acaba suicidándose. Curioso final, cuando estamos viendo a Charlie vivir justo lo opuesto, aunque provoque el mismo fatídico final.
Es cierto que la metáfora del carácter expiatorio de Moby Dick cae en lo obvio, así como que su desenlance abre las puertas a una alegoría religiosa digna del muchachito misionero que piensa que salvar a Charlie es una prueba impuesta por dios, pero La ballena es mucho más que eso: se trata de la última parada de una vida que alguna vez fue plena pero ahora solo espera su fin, en un comeback.
Película usa del 2022.de una duración de 117 minutos, con una valoración de 7/10, bajo dirección de Darren Aronofsky y guión Samuel D. Hunter, con un presupuesto de 3 millones de dólares.
El enfoque está claro desde el principio. Un profesor de literatura que lucha contra su propio ser, y su físico, buscando su liberación ante su desaparicion. Una persona hundida en la depresión y sus consecuencias, como la obesidad mórbida que vive, consume a Charlie.
El grandisimo nivel actoral y de interpretación de Brendan Fraser hace que nos quitemos el sombrero ante él y la espartana puesta de escena. Transmite mucha lástima y agobio a partes iguales, su ansiedad por la comida cala en los que estamos al otro lado de la pantalla. Ansia como engulle. Ansia que no mastica. Ansia que casi se ahoga. Ansia por su autodestrucción. Ansia su soledad. Ansia su tristeza y ansia la pena que te invade, en su deseo de auto de auto destrucción.
A partir de eso es cuando vamos a ir conociendo la vida de Charlie. Poco a poco, de la mano de los actores secundarios que se van a ir sucediendo a lo largo de la película, se va desarrollando la narrativa, aunque nunca salgamos de la casa del protagonista. Todo lo que la forma aunque no podamos verlo. Es una puesta de escena teatral. Samuel D. Hunter inspiró al director Darren Aronofsky.
En diferentes momentos de la histórica en el que fuera de campo cobra más importancia que lo que vemos. De esta manera su peculiar trama actoral, nos cuentan cómo él abandona a su mujer y a su hija por un alumno al que da clases. Es así, como nos enteramos que pertenecía a una secta de la que intenta salir, cómo se adentra en una depresión que le provoca un trastorno alimenticio y se queda en los huesos y finalmente acaba suicidándose. Curioso final, cuando estamos viendo a Charlie vivir justo lo opuesto, aunque provoque el mismo fatídico final.
Es cierto que la metáfora del carácter expiatorio de Moby Dick cae en lo obvio, así como que su desenlance abre las puertas a una alegoría religiosa digna del muchachito misionero que piensa que salvar a Charlie es una prueba impuesta por dios, pero La ballena es mucho más que eso: se trata de la última parada de una vida que alguna vez fue plena pero ahora solo espera su fin, en un comeback.
La ballena es uno de los reencuentros más emocionantes del cine, por un lado el extraordinario director Darren Aronofsky estrena una película luego de casi seis largos años y por el otro vuelve a Hollywood uno de los actores más queridos de la época de los 2000 pero esta vez para consagrarse como no solo un actor popular si no como un gran actor con un nivel interpretativo demencial, por qué lo que hace Brendan Fraser con el papel de Charlie en la pelicula, es una interpretación para la historia ya no solo por como es, si no por la grandeza de lo que representa.
Aparte de la de Fraser hay dos mujeres más que logran su máximo potencial interpretativo hasta el momento en este film, y ellas son Sadie Sink y Hong Chau, las dos magníficas.
La fotografía del film es algo simple debido a que toda la pelicula transcurre en un apartamento pero asombroso, pese a lo comentado el film juega mucho con la simetría y los paralelismos entre paredes pasillos e inclusión puertas pero también da un toque claustrofobico y más con el formato en el que está grabado la película hecho aposta por el director.
La trama es lo peor que tiene el film y es su gran punto negativo, me parece mal que en ocasiones pongan al personaje de Charlie (Brendan Fraser) como un monstruo pero no es ya que lo hagan si no el como lo hacen y aunque de lastima no es forma de compactarlo con la trama. Al igual la propia trama carece de originalidad.
La trama narra la historia de Charlie (Brendan Fraser) un hombre con obesidad mórbida que no puede ni levantarse del sofá, esto le causa muchas más enfermedades tanto cardiovasculares como en tensión arterial. Aún así el es muy positivo y trabaja dando clases de literatura online.
Pero en su vida habrá un cambio cuando se entera que le queda poca vida y decide recuperar la relación con su hija a la que abandonó cuando tenía ocho años y por ello revivir su triste pasado.
Aronofsky y sobre todo Fraser nos han dejado boquiabiertos con su nuevo film.
Estoy deseando volver a ver a Fraser en la gran pantalla y está vez no como el actor "popular", si no como un gran actor.
Aparte de la de Fraser hay dos mujeres más que logran su máximo potencial interpretativo hasta el momento en este film, y ellas son Sadie Sink y Hong Chau, las dos magníficas.
La fotografía del film es algo simple debido a que toda la pelicula transcurre en un apartamento pero asombroso, pese a lo comentado el film juega mucho con la simetría y los paralelismos entre paredes pasillos e inclusión puertas pero también da un toque claustrofobico y más con el formato en el que está grabado la película hecho aposta por el director.
La trama es lo peor que tiene el film y es su gran punto negativo, me parece mal que en ocasiones pongan al personaje de Charlie (Brendan Fraser) como un monstruo pero no es ya que lo hagan si no el como lo hacen y aunque de lastima no es forma de compactarlo con la trama. Al igual la propia trama carece de originalidad.
La trama narra la historia de Charlie (Brendan Fraser) un hombre con obesidad mórbida que no puede ni levantarse del sofá, esto le causa muchas más enfermedades tanto cardiovasculares como en tensión arterial. Aún así el es muy positivo y trabaja dando clases de literatura online.
Pero en su vida habrá un cambio cuando se entera que le queda poca vida y decide recuperar la relación con su hija a la que abandonó cuando tenía ocho años y por ello revivir su triste pasado.
Aronofsky y sobre todo Fraser nos han dejado boquiabiertos con su nuevo film.
Estoy deseando volver a ver a Fraser en la gran pantalla y está vez no como el actor "popular", si no como un gran actor.
Es sin duda la única película con la que me he emocionado, y eso que la he visto por partes. La veas durante 1 minuto y dejes de verla o del tirón, te metes de lleno en la historia, por no hablar del final. La escena más perfecta que he visto en mi vida, sin exagerar. Cuando
spoiler:
Charlie se levanta por sí mismo y camina hacia su hija (Escena final)
es de las escenas más bonitas que he visto. 5 estrellas porque no se pueden poner 6.
es de las escenas más bonitas que he visto. 5 estrellas porque no se pueden poner 6.
Después de haber visto parte de la filmografía de Aronofsky, esto me ha dejado en fuera de juego.
Aunque el arco argumental es claro y ocupa gran parte de la película, tiene otros aspectos y tintes que hacen que la eleven a algo más que una simple propuesta sobre la obesidad.
La relación paterno-filial, las injusticias, la escritura, las inseguridades, los complejos y sobre todo, una explicación y un tratamiento de la religión que me parece súper inteligente y acertada.
Como el director ha sabido utilizar ese formato de película a nivel técnico para que él ocupe más espacio en la pantalla, y como sus secundarios van siendo “cómplices” de esta muerte anunciada.
Bregan Fraser… poco más que decir, sublime.
PD: un Oscar por favor
Aunque el arco argumental es claro y ocupa gran parte de la película, tiene otros aspectos y tintes que hacen que la eleven a algo más que una simple propuesta sobre la obesidad.
La relación paterno-filial, las injusticias, la escritura, las inseguridades, los complejos y sobre todo, una explicación y un tratamiento de la religión que me parece súper inteligente y acertada.
Como el director ha sabido utilizar ese formato de película a nivel técnico para que él ocupe más espacio en la pantalla, y como sus secundarios van siendo “cómplices” de esta muerte anunciada.
Bregan Fraser… poco más que decir, sublime.
PD: un Oscar por favor
Muy buena película, Brendan merecedor del Oscar, con Austin, una película bella,humana y con una sensibilidad extraordinaria, todo lo contrario a la basura de película todo a la vez en todas partes,estamos locos!!! 11 nominaciones? Me volví loco de remate viéndola y lo más peligroso es la historia,a los jóvenes los va a llevar a psiquiatría,Jackie y bruce Lee por esa cuenta de nominaciones deberían tener varios oscar,vaya vergüenza el año pasado el poder del perro y ahora esta basura.
Una hermosa pelicula que te deja con miles de sensaciones. Darren aronofsky lo ha hecho una vez mas.
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