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Un visitante
0,5
Publicada el 23 de noviembre de 2018
esto no es una película, es un despropósito, con Nicolas Cage que es un sobre actuado, con muy malos efectos especiales digitales y un guion repugnante, perdida de tiempo ver este bodrio en el cine.
Es fácil culpar al escritor y director Mark Steven Johnson. Después de todo, él es el tipo que nos dio la adaptación de "Devil," que es uno de los cuentos más intrigantes del universo de Marvel Comics.
Pero para ser justos con Johnson, Ghost Rider no tiene los seguidores devotos de Spider-Man o incluso Blade, y es fácil ver por qué. El personaje, al menos como se muestra aquí, no es tan interesante.
Cuando no está desafiando a la muerte y el desmembramiento con sus saltos de motocicleta, Johnny Blaze (Nicolas Cage) pasa por una transformación sorprendente. Se convierte en una criatura esquelética que viaja en una motocicleta en llamas y puede arder con las llamas del infierno.
Si te encantó Daredevil y te animo a decir que lo hiciste, te sorprenderás de que el director Mark Steven Johnson lo haya hecho de nuevo: ha tomado a un héroe oscuro y retorcido del libro de jugadas de Marvel Comics y lo homogeneizó en un niño de juguete adecuado para el consumo masivo. Nicolas Cage como Johnny Blaze, el piloto de motocicleta que hace un trato con Mephistopheles (Peter Fonda). Para mantenerse con vida, después de un choque de su cráneo en llamas, Johnny cumplirá las órdenes del diablo. Él está encantado, por supuesto, y Cage puede perseguirlo con lo mejor de ellos. Pero los efectos informáticos que convierten a Johnny en la ardiente caracterización de la incineración de Ghost Rider.
perdida de tiempo ver este bodrio de adaptación, no se salva nada, todo en está película resulta ser demasiado mediocre y chapucero, con Nicolas Cage que es un sobreactuado, unos villanos que su aspecto parece haber-se sacado de crepúsculo, efectos especiales demasiado surrealistas y un guion de mierda, no la volveré a ver nunca más en la vida.
Siempre he sido fan de este personaje, pero lo que han hecho en está película es lamentable, mala de principio fin, con un guion repugnante, efectos visuales muy surrealistas y con Nicolas Cage que es un sobreactuado y exagerado, otro bodrio de adaptacion.
como podiamos esperar algo si volvia otra adaptacion de Mark Steven Johnson, fallida por todos los lados como daredevil, como os lo exlico, poner a Nicolas Cage como un super heroes es como poner a Will Smith como superman, Nicolas Cage sobreactua y exagera cada una de las escenas, yademás con un guion repugnante, pesima adaptacion de un buen personaje.
Si te encantó Daredevil y te animo a decir que lo hiciste, te sorprenderás de que el director Mark Steven Johnson lo haya hecho de nuevo: ha tomado a un héroe oscuro y retorcido del libro de jugadas de Marvel Comics y lo homogeneizó en un niño de juguete adecuado para el consumo masivo. Nicolas Cage como Johnny Blaze, el piloto de motocicleta que hace un trato con Mephistopheles (Peter Fonda). Para mantenerse con vida, después de un choque de su cráneo en llamas, Johnny cumplirá las órdenes del diablo. Él está encantado, por supuesto, y Cage puede perseguirlo con lo mejor de ellos. Pero los efectos informáticos que convierten a Johnny en la ardiente caracterización de la incineración de Ghost Rider. El verdadero mal en esta película no es Blackheart (Wes Bentley), el hijo del diablo, es el diablo del cine moderno que chupa el alma: la fórmula de Hollywood.
Si amaras a Daredevil y te retara a decir que lo hiciste, te maravillará de que el director Mark Steven Johnson lo haya vuelto a hacer: sacó a un héroe oscuro y retorcido del libro de jugadas de Marvel Comics y lo homogeneizó en un muñeco apto para el consumo masivo. Nicolas Cage como Johnny Blaze, el conductor de acrobacias de la motocicleta que hace un trato con Mephistopheles (Peter Fonda). Para mantenerse con vida, después de que su cráneo se incendie, Johnny cumplirá las órdenes del diablo. Está obsesionado, por supuesto, y Cage puede estar atormentado con lo mejor de ellos. Pero los efectos de la computadora que convierten a Johnny en el ardiente Ghost Rider incineran la caracterización. El verdadero mal en esta película no es Blackheart (Wes Bentley), el hijo del diablo, es el demonio del cine moderno que chupa almas: la fórmula de Hollywood.
Para mi Ghost Rider ha sido una de las películas que más me han gustado ya que mezcla locura con demonios y hay un poco de amor, pero me encanta su moto y sus llamas, su calavera, sus cadenas me encanta todo.