Amor de varios quilates
por Miguel BlancoLas películas de los hermanos Farrelly siempre parten de un punto esperpéntico, de alguna situación irreal o embarazosa que entra en el mundo convencional y ha de ser tomada con normalidad. Por ejemplo, los hermanos siameses de 'Pegado a ti', uno de los cuales quiere ser actor, para lo cual siempre deberá aparecer cerca del borde de la pantalla para que así no aparezca su hermano pegado.
En 'Amor ciego' tenemos otra situación extraña, incluso mágica. El superficial Hal (Jack Black), que solo busca relacionarse con mujeres despampanantes debido a un trauma infantil, es hechizado para que todas le parezcan supermodelos. Así se enamora de una mujer extremadamente obesa, pero que para ella tiene los finos y delicados rasgos de Gwyneth Paltrow. Así se plantean hilarantes gags en los que la obesa Paltrow está siempre fuera de lugar, y Hal no entiende la situación, suponiendo que se debe a casualidades o cosas extrañas, y no al superdotado físico de su novia.
Siguiendo el tono habitual del cine de estos hermanos, pese a sus chistes escatológicos y subidos de tono, es también una película ingenua y bondadosa que habla sobre la pureza del amor y la necesidad de aceptar nuestro lugar en el mundo.
A favor: Las situaciones en las que se contrapone la visión adulterada de Hal y lo que realmente está sucediendo. Gwyneth Paltrow haciendo de obesa.
En contra: Que algunos chistes puedan ofender la corrección política de muchos espectadores.