Robbie Williams se une a la boyband Take That con sólo 16 años y se convierte rápidamente en una de las mayores estrellas del pop de su generación. Pero mientras su carrera se dispara, su vida se convierte en una montaña rusa emocional. Entre los altibajos de la fama y las dudas sobre sí mismo, lucha contra su adicción a las drogas y sus crisis personales. Al borde de un colapso total, Robbie debe decidir si destruirse a sí mismo o reunir el valor para enfrentarse a sus demonios interiores.