La fábrica gallega de loza Pontesa cerró en 2001. Veinte años después, a la espera de sentencia sobre su reclamación de deuda pendiente, un grupo de trabajadoras recuerda el símbolo de su libertad individual, su emancipación económica y su lucha sindical. Nieves, Ester, Manuela, Carmen P. y Carmen A. mantienen viva la pelea por los derechos de la mujer en la España del siglo XX. La historia de sus vidas se despliega en presencia de la esfinge: reclama la memoria de las operarias del textil, la loza y la conserva y anuncia voces y archivos que engarzan tiempos y cuerpos diferentes. ¿Trabajar sin cobrar? Eso ni hablar.