Kia Anderson es una aspirante a actriz desesperada por su gran debut. Un día, recibe una inesperada llamada que la invita a participar en una película de terror. Llena de emoción y con la esperanza de que esta sea la oportunidad que ha estado esperando, acepta sin dudarlo.
Sin embargo, al llegar al set, pronto descubre que el enfoque del director hacia el "realismo extremo" es exagerado y perturbador, difuminando peligrosamente la línea entre la actuación y la realidad. Lo que comenzó como el sueño de su vida rápidamente se convierte en una pesadilla.