Macbeth es la primera película de Orson Welles adaptada de una novela de caballería, una etapa que le duro hasta el finde sus días y en la cual fue considerado como el mejor director en llevar novelas de caballería a la gran pantalla.
Welles empieza su aventura con Macbeth, y consigue en su primera película épica, hacer la mejor adaptación a Macbeth de la historia del cine hasta ahora, siendo una de las primeras y teniendo más de 75 años, por que Macbeth es una obra maestra absoluta de película.
La puesta en escena y la fotografía del film son un auténtico espectáculo visual, una de las mejores fotografías que he visto en un film en tods mi vida, con ese toque lúgubre y oscuro que se maneja con un sublime trabajo de iluminación y diseño de planos durante toda la cinta.
Las interpretaciones son de Oscar, con un Orson Welles en uno de los mejores papeles de su carrera y una Jeanette Nolan magnífica.
La trama narra la historia de Macbeth (Orson Welles), un caballero de Escocia que en la vuelta a casa de una victoria en el campo de batalla, se cruza con tres brujas de las cuales recibe tres profecías, una de ellas llegar ha ser rey. Cuando las otras dos se cumplen Macbeth se consume de ambición y ansias de llegar ha ser rey, cuando de lo cuenta a su mujer (Jeanette Nolan) ella decide ingeniar un plan para asesinar al rey.
Aunque al principio Macbeth no quiere traicionar a su lealtad, cae en la tentación y en la presión de su mujer y decide hacerlo.
Macbeth re Orson Welles no solo empezó una etapa cinematográfica, si no que dio a la novela de William Shakespeare el valor cinematográfico que se merecía.